Ex trabajadores de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), acusaron al director general de Quejas y Orientación de ese organismo, Máximo Carvajal Contreras, de cobrar un sueldo como profesor de tiempo completo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y no cumplir con su tarea al respecto. Además de agredir un vigilante de la Facultad de Derecho.
En conferencia de prensa Gerardo Cid Huerta, y Juan Víctor Corona, quienes laboraban en la CNDH como visitadores adjuntos, dieron a conocer documentos en los que dijeron, sustentan sus denuncias, uno de ellos, un escrito que el consejero Universitario, Eduardo López Betancourt, envió a Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la CNDH, que está fechado el 20 de febrero pasado y en el cual le dice que Carvajal estaría cometiendo daño patrimonial contra la UNAM.
Los ex visitadores dieron a conocer que también Armando Guadalupe Soto Flores, director adjunto de Quejas y Orientación, "es ‘aviador’" en la Universidad Nacional y mencionaron que López Betancur en una carta le hace saber a Plascencia que sería muy grave que ese funcionario no haya solicitado licencia en tiempo y forma para dedicarse de tiempo completo a sus labores en la CNDH.
"Lo tengo perfectamente presente como alumno que fue en mi grupo de postgrado" y ha logrado en la UNAM ser profesor de tiempo completo. "Espero que en ese cargo sí haya solicitado licencia ya que sería grave que lejos de ayudar a la UNAM, se le cause un daño patrimonial como en los casos de Carvajal y Soto", sostiene en su escrito López Betancourt.
Este último, dijeron los ex visitadores adjuntos, informó a la maestra Aurea del Carmen Navarrete Arjona, auditora Interna de la UNAM que "en la Facultad de Derecho de la Máxima Casa de Estudios existe un buen grupo de profesores, con plazas de tiempo completo, que deben laborar cuarenta horas a la semana, y varios de ellos desde hace años vienen defraudando a la Universidad, ya que han aceptado" cargos en el Gobierno Federal.
Los quejosos consideraron que Carvajal Contreras no solamente comete fraude en contra de la UNAM, sino que, en un hecho inverosímil para quien es el responsable de ser el primer contacto con los gobernados a fin de tratar de salvaguardar sus derechos humanos, se dedica a tratar soez y prepotentemente a los trabajadores que tienen la desgracia de cruzarse en su camino.
Así le sucedió en mayo de 2011 a Diego Adrián Barrón Rivas vigilante de la facultad de Derecho a quien amenazó con "partirle la madre" al tiempo en que lo empujaba y le daba golpes en el cuerpo. Recientemente a su chofer le grito una serie de improperios y le dijo que podía volver a quejarse con el Oficial Mayor.
"Nosotros como sindicalistas nos preguntamos: ¿En manos de quien esta la protección de los derechos humanos del pueblo mexicano? ¿Qué calidad moral tiene una persona que defrauda a la UNAM para ser el primer contacto con los gobernados que van en busca de protección? ¿Cuánto cobran mensualmente en la UNAM este par de aviadores que también se llevan elevados sueldos en la CNDH?", sostuvo Gerardo Cid.