El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, rechazó un eventual debate con su adversario, el candidato opositor a la presidencia Henrique Capriles, porque le daría vergüenza medirse con “la nada”.
Chávez dijo que le daría “mucha vergüenza (un debate), porque allí (en la oposición) hay la nada. Eso sería como poner a boxear a Cassius Clay en sus mejores momentos con Diosdado (Cabello, presidente del Congreso) que fue boxeador en una época”.
“Ahí no hay nada que debatir, no hay idea, es la nada, el chayotismo (bobería)”, recalcó el líder de la Revolución Bolivariana en una llamada telefónica a la rueda de prensa semanal del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Chávez, quien buscará una segunda reelección consecutiva en los comicios de octubre próximo, sentenció que en la oposición "no hay discurso, tienen una ensalada que no se sabe ni de qué sabor. ¿Qué es lo que hace la oposición? No tienen discurso”.
El mandatario aseguró que en la campaña electoral que comienza el 1 de julio le gustaría tener al frente a personas de la talla de los fallecidos ex presidentes venezolanos Rómulo Betancourt, Rafael Caldera o Carlos Andrés Pérez.
“Lo que tengo yo al frente es la nada, entonces, bueno, el gran debate que se haga en las calles, el pueblo, las comunidades. Lo demás, repito, es la nada”, enfatizó.
Tras recordar que "no soy monedita de oro para caerle bien a todos”, Chávez exhortó a aquellos que no le tienen estima "a darse cuenta de la realidad".
Recordó que "la campaña comienza el 1 de julio, pero la derecha está en campaña desde hace tiempo. Allá ellos, pero está el marco de una ley. ¿Cuánta plata están gastando? ¿De donde sacarán el dinero? Sin rendirle cuentas a nadie".