El Congreso colombiano descartó hoy beneficios como el indulto y la amnistía para los integrantes de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que participen en un proceso de paz.
El presidente del Senado colombiano, el oficialista Roy Barreras, recordó que los insurgentes acusados de delitos atroces y de lesa humanidad, no serán cobijados con el perdón en el marco de la negociación.
"Tiene que haber justicia, porque no habrá indultos ni amnistías, ni leyes de punto final. Los máximos responsables de los crímenes más atroces, de lesa humanidad, deberán pagar por sus crímenes", dijo Barreras.
El legislador aclaró que tampoco habrá retiro de tropas de ningún lugar de Colombia para realizar los diálogos, a fin de evitar que ocurra lo sucedido entre 1998 y 2002 con las fallidas conversaciones de paz en la zona de distensión de San Vicente del Caguán.
El gobierno del entonces presidente Andrés Pastrana decidió romper las conversaciones de paz con las FARC, tras acusar a esa guerrilla de utilizar la zona despejada por el Ejército para delinquir.
"Aquí no se trata de rendiciones indignas, se trata de encontrar un camino que todos los colombianos puedan apostarle a la construcción de un nuevo país", sostuvo el senador del partido oficialista de la U.
Afirmó que en el marco jurídico para la paz, pendiente de su reglamentación en el Congreso, es prioridad que quienes se desmovilicen deben contribuir a la verdad, justicia y reparación de sus víctimas.
Santos reveló este lunes que su gobierno avanza en conversaciones de paz con las FARC para buscar el fin de conflicto armado interno, aunque advirtió que se mantendrá la presencia militar en todo el territorio.
