La autoridad electoral mexicana descartó que el próximo veredicto sobre la validez de las elecciones presidenciales del 1 de julio conduzca a un "estallido social" como han sugerido políticos de izquierda.
El presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés, rechazó que el país viva un clima de efervescencia que ponga en riesgo la paz, y aseguró que los ciudadanos "están tranquilos, viviendo este proceso final de las elecciones y expectantes para conocer el fallo que emitirá el Tribunal Electoral".
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) analiza las pruebas presentadas por las diversas fuerzas políticas y se espera que sus magistrados anuncien a más tardar el 6 de septiembre su decisión sobre la validez o invalidez de las elecciones.
"En las últimas semanas hemos vivido un debate postelectoral vinculado con la arquitectura jurídica que permite a los partidos políticos impugnar; esto nunca lo vamos a regatear o a criticar", dijo Valdés en conferencia de prensa.
No obstante, añadió, "la repercusión de algunos de los argumentos que se han planteado tiene que ver con la inercia de una cultura política aún deficitaria" basada en la desconfianza.
"Yo no comparto esa visión; es una hipótesis sobre el estado de ánimo de nuestra sociedad. Yo no alcanzo a percibir que el estado de ánimo de la población se encuentre en esas condiciones", apuntó Valdés.
También se pronunció por la prudencia a fin de que el Tribunal presente a tiempo su fallo, el cual "habrá que acatarlo".
El titular del IFE sostuvo que los resultados oficiales de la jornada del 1 de julio "fueron precisos y transparentes", lo que se reflejó en el voto diferenciado de los ciudadanos.
Por su parte, Jesús Zambrano, presidente del Partido de la Revolución Democrática declaró que "está claro que Leonardo Valdés trae su animómetro con que está midiendo el estado de ánimo de la sociedad muy diferente a lo que nosotros estamos percibiendo".
"El que expresemos nuestro punto de vista por la preocupación que tenemos de cómo está un estado de ánimo complicado de la sociedad, no nos convierte en agitadores profesionales ni en desestabilizadores, ni amedrentadores", añadió Zambrano en conferencia de prensa.
