Los enfrentamientos continúan. (EFE)
Las fuerzas de seguridad de Túnez y manifestantes se enfrentaron hoy, por tercer día consecutivo, en el centro de la ciudad de Siliana, durante una nueva protesta contra el primer ministro Hamadi Jebali y el desempleo.
Los choques estallaron cuando los manifestantes intentaban irrumpir en una estación de policía y las fuerzas del orden hicieron disparos de advertencia y lanzaron gases lacrimógenos para tratar de disuadirlos, reportó el sitio web de noticias Tunisialive.
Los enfrentamientos de este jueves, que dejaron al menos una veintena de lesionados, siguieron a los registrados la víspera en la misma ciudad que se saldaron con más de 250 heridos.
Los habitantes de Siliana, ciudad que ha sido marginada por años, se quejan de los altos índices de desempleo y la falta de progresos del gobierno en mejorar la calidad de vida, por lo que exigen la renuncia de Jebali y fondos para impulsar el desarrollo en la región.
El malestar en Siliana, que por años ha sido marginada, se ha extendido a otras partes de esa empobrecida región tunecina, que también fustigan la incapacidad del gobierno que fue electo tras la caída del ex presidente Zine El Abidine Ben Ali, el año pasado.
En Kesra, a 40 kilómetros de Siliana, decenas de manifestantes incendiaron un puesto de seguridad y dos patrullas, luego que la policía disparó gases lacrimógenos para contenerlos, mientras otro grupo atacó la oficina del gobernante partido islamista Enhada.
La localidad de Gaafour, al norte de Siliana, manifestantes lanzaron piedras contra oficiales de la policía y contra un puesto de control del ejército, según los reportes.
Jabali expresó este jueves su preocupación por la situación, pero descartó la posibilidad de que él o el gobernador provincial Ahmed Zine Mahjoubi vayan a dimitir.
Anunció asimismo que fue nombrada una comisión del gobierno para analizar la situación y buscar soluciones a las problemáticas planteadas por los manifestantes.
