La OTAN anunció que tiene ya desplegados varios miles de asesores militares en Afganistán para apoyar a las fuerzas de seguridad afganas y "acelerar" así su desarrollo y el proceso de transición por el que pasarán a encargarse de la seguridad en el país.
La puesta en marcha de esos equipos forma parte de la estrategia para transferir progresivamente la responsabilidad militar al Ejército y la Policía afganos y debe ser un "hito" en la transición, según ha explicado hoy en una rueda de prensa el mayor general Stephen J. Day, uno de los responsables de planificación de la misión aliada. Los asesores se distribuyen en cerca de 300 equipos, con una media de entre 10 y 20 efectivos cada uno, repartidos por todo el país, pero con especial presencia en las conflictivas zonas del sur y el este de Afganistán.