No se puede describir con palabras lo que se vivió en el Super Bowl XLVI porque tanto Gigantes como Patriotas, nos volvieron a ofrecer un partidazo para definir al campeón de la NFL lleno de dramatismo y emoción y que, por tercera ocasión, un mariscal de campo volvió a vencer por segunda vez a su antagonista tal y como lo hicieran Terry Bradshaw a Roger Staubach así como Troy Aikman a Jim Kelly y ahora Eli Manning a Tom Brady.
Existe un slogan que adaptaron al futbol americano y que es una fidedigna realidad titulado: "LAS OFENSIVAS GANAN LOS PARTIDOS, LAS DEFENSIVAS GANAN LOS CAMPEONATOS" pero al parecer este enunciado, ha quedado en el recóndito de los son designados para elegir al jugador más valioso del Super Bowl porque, de las 46 ediciones que se han celebrado del juego que prácticamente paraliza a la Unión Americana, ¡sólo 8 elementos! de la línea defensiva, se han llevado tan privilegiada distinción!
Muy personalmente y por citar algunos casos, se encuentra precisamente el que jugaron los Patriotas y los Gigantes hace 4 años en la edición XLII donde el equipo del tramposo Bill Belichick, intentaba terminar invicto, pero Eli Manning jugó como nunca y por tal razón, le dieron la distinción del M.V.P. pero, ¿Dónde quedó Michael Strahan el defensivo de Nueva York que también dio el encuentro de su existencia a tal grado que Tom Brady aún lo sigue soñando? ¿Por qué no se lo dieron a él?
¿Y el Super Bowl que se jugó un año después? Por increíble que parezca, alguien no se dio cuenta de que, James Harrison, le interceptó un pase a Kurt Warner en su zona de anotación y lo regresó hasta el otro lado recorriendo todo el emparrillado y que, en lugar de haber sido 7 puntos para Arizona, se convirtió en touchdown para Pittsburgh y uno se pregunta, ¿Por qué Santonio Holmes? ¿Sólo por el pase que logró? En ese caso, la distinción debió haber sido para Ben Roethlisberger ya que el partido finalizó por una diferencia de 4 puntos.
Y 12 meses posteriormente, también se desviaron las miradas para los defensivos de Nueva Orleans porque, para ese Super Domingo, Peyton Manning llegaba como un quarterback de élite.
¿Y ayer dónde dejaron a Justin Tuck o a Jason Pierre-Paul? Ya dejen de ser cegatones!
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