El Coloso de Santa Ursula. (Archivo)
La Selección Mexicana buscará amarrar su boleto al hexagonal final de la Concacaf con miras a la Copa del Mundo del 2014, cuando mañana martes se mida ante Costa Rica en la cancha del Estadio Azteca.
En dicho inmueble el Tri prácticamente es imbatible. En 37 partidos de fase de clasificación, cosecha 33 victorias, tres empates y una derrota, esta última se dio precisamente ante los Ticos el 16 de junio de 2001 después de caer 2-1 con un tanto de Hernán Medford en la recta final del encuentro.
Una victoria contra los dirigidos por Jorge Luis Pinto sería suficiente para que, matemáticamente, el cuadro de José Manuel de la Torre obtenga el pase, cuando todavía le restarían dos encuentros más por disputar: contra Guyana en Georgetown el 12 de octubre y ante El Salvador en la capital mexicana el 16 del mismo mes.
El dominio contra los costarricenses ha sido abrumados en los últimos años. En los más recientes once partidos, México salió airoso en nueve y empató en dos oportunidades. Las igualadas fueron en el 2001 en choque eliminatorio realizado en San José (0-0), y en la Copa Oro del 2009 (1-1).
De mantener la calidad de invicto, no sería la primera vez que el Tri finaliza la ronda previa al hexagonal final sin caer en un sólo encuentro. La más reciente ocasión fue rumbo a la Copa del Mundo de Alemania 2006. Bajo el mando de Ricardo Antonio La Volpe, los verdes ganaron los seis encuentros, dos de ellos de manera contundente: 7-0 a San Vicente y le clavó 8-0 a Saint Kitts y Nevis.
México podría finalizar invicto esta fase, aunque todavía le restan tres partidos por disputar, y uno de ellos de visita.