"La Comarca Lagunera hoy de fiesta se vistió, y miles de manos aplaudiendo con fervor", menciona una de tantas canciones representativas del Santos Laguna. Hoy, todo es contrario a esta frase. Hoy, La Laguna está triste, no puede soportar la idea de no estar en finales como nos ha venido acostumbrando el equipo. Hoy, el campeón ha caído.
Un nuevo fracaso se une al historial de los Guerreros. Luego de que el club nos llevara a la gloria en el Clausura 2012. Las expectativas para el Apertura eran grandes, se daba continuidad al conjunto que le otorgó la cuarta estrella al equipo y la confianza en la afición era inmensa.
Un torneo en el que los albiverdes no alcanzaron a mostrar el nivel desempeñado en pasados torneos. Donde se veía venir esta situación tras ganar sólo uno de cuatro partidos de pretemporada. Donde inclusive en su partido de presentación ante Correcaminos se sufrió para poder alcanzar un empate.
Dos victorias en los primeros dos encuentros hacían valer la defensa del campeonato, luego comenzó el bache de cuatro partidos sin ganar. Un Santos que de tener una ventaja de dos goles ante Puebla se dejó alcanzar. El recién ascendido les pegó un baile a los actuales monarcas del futbol. Un Pumas que no mostró nada en el torneo, vino a Torreón y se llevó los tres puntos, haciendo valer la primera derrota en el TSM en todo el año. Un encuentro desangelado ante Pachuca, donde ninguno de los dos equipos mostró la garra por sacar los tres puntos.
Una pequeña esperanza en que el conjunto lagunero había retomado el camino y pudiera comenzar a cosechar resultados positivos se llegó hasta la jornada 7 cuando se alcanzaron a ver las ganas de derrotar a los Tigres y se logró un 3-1. Un América nos volvió a la realidad. Otro desesperante encuentro como locales ante Jaguares donde ninguno de los dos equipos se hizo daño.
Se volvió a la senda del triunfo. Por segunda ocasión en el torneo se lograban dos victorias consecutivas, esta vez ante Atlante y Atlas, equipos que se le han facilitado últimamente a los Guerreros.
Una nueva racha negativa apareció, otra vez cuatro partidos sin conocer la victoria. Los dirigidos por Benjamín Galindo se enfrentaban ante el peor equipo del torneo, Querétaro. La falta de contundencia y un error garrafal de Felipe Baloy terminó por darles un punto a ambas escuadras. Un atractivo encuentro ante los líderes -en ese entonces- Xolos, que nos hacía pensar en un buen cierre de temporada. Una dolorosa caída en aquel humillante partido ante Toluca, donde el diablo, con diez jugadores, bailó y disfrutó a los Santos a su merced. Una visita a la Sultana del Norte, donde se repitió el encuentro de la anterior final ante los Rayados, donde ya con una desventaja de dos goles, quisieron ponerse las pilas en los últimos minutos pero no se alcanzó el empate.
El conjunto lagunero llegaba a la fecha 16 contra Cruz Azul. La directiva mediante redes sociales convocó a la afición guerrera a volcarse al Estadio Corona. "Nunca te rindas" fue el slogan del club, a sabiendas que matemáticamente aún podía colarse a la liguilla a pesar de tan mal torneo realizado.
Pudimos presenciar un partido lleno de emociones y de ganas por sacar el resultado por parte de los campeones, quizá el partido más rescatable del torneo. Se lograron los tres puntos y todo quedaba al margen de la última jornada.
Para el último encuentro del torneo volvió a aparecer ese Santos Laguna sin contundencia, el de los errores defensivos. Dos goles en contra terminaron con las ilusiones de la afición. La Laguna tenía que aceptar algo que no puede tolerar, quedarse sin fiesta, ver las finales por televisión.
Rumores van, rumores vienen. Hoy sólo queda esperar la situación de la posible venta del club. Mientras tanto, se renueva contrato a Benjamín Galindo como estratega del equipo y el cuerpo técnico conformado por Adomaitis y Héctor López dejan de formar parte de la institución. Probablemente saldrán varios jugadores del plantel.
"Nos gusta ver sudar a nuestros jugadores y ver el miedo en la cara del rival", menciona el himno oficial del club. Si en verdad se quiere hacer valer lo mencionado, hay que tomar cartas en el asunto y volver a ser ese equipo protagonista de la liga mexicana de futbol.
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