El reiki

Un método de sanación natural basado en la apertura y canalización de la energía cósmica es el Reiki, el cual permite armonizar y sanar de forma integral; es decir, a nivel físico, emocional, mental y espiritual.

Silvia Xóchitl De La O de Chacón, quien practica esta disciplina, nos explica que etimológicamente significa Rei (energía universal que esta presente en el cosmos) y Ki (energía individual presente en cada ser viviente), en pocas palabras “energía universal presente en cada uno de nosotros”.

El Reiki es una disciplina japonesa, propuesta por Mikao Usui a finales del siglo XIX; aunque hay muchas versiones, muchas coinciden en señalar que el Sensei Usui realizó un ayuno prolongado por 21 días en el monte sagrado Kuruma Yama en Kyoto, en el cual encontró las respuestas a lo que buscaba; una versión narra que fue iluminado en un período de trance, luego del cual encontró la convicción en el uso de la energía para curar.

En cuanto a su filosofía, el Reiki se basa en cinco principios:

1. Sólo por hoy no te preocupes.

2. Sólo por hoy no te enfades.

3. Honra a tus maestros, padres, vecinos y amigos.

4. Gánate el pan honestamente.

5. Sé agradecido hoy.

Existen diferentes tipos de Reiki

Entre sus múltiples variaciones se encuentran: Karuna, Tibetano, Ryoho, Gendai, Polarizado, Teramai, Imara, Egipcio y más recientemente Angélico; ciertamente todo evoluciona, sin embargo las ideas y propuestas iníciales se mantienen en todas las corrientes y deben conservarse, ya que el sentido original del Reiki propuesto por Sensei Usui es: “Reiki es un camino espiritual”. En cuanto a su práctica, el Reiki canaliza la energía a través de las manos hacia el cuerpo físico, y de este a los cuerpos internos espirituales y energéticos, completando así la curación a todos los niveles.

Los beneficios

Esta técnica parte de una tesis muy sencilla explica Silvia Xóchitl De La O de Chacón: “Que el ser humano es todo energía". El Reiki sostiene que cuando la energía se bloquea, por cualquier circunstancia, es cuando se produce una enfermedad. La imposición de las manos en la zona enquistada, donde la energía ha quedado taponada, sirve para disolver ese 'nudo' que impide que la energía fluya y así devolver el equilibrio al organismo.

Como terapia complementaria

Hoy en día el Reiki se está difundiendo en los hospitales como un complemento de la cura sanitaria, sobre todo en Europa y Estados Unidos, para sanar una interminable lista de enfermedades, tanto físicas como emocionales. Su "práctica habitual" puede aliviar e incluso curar dolores crónicos como artritis, reuma o migraña e incluso ayuda a fortalecer físicamente a los pacientes en casos de cáncer para soportar los tratamientos. También acelerar la recuperación de lesiones óseas y musculares, ayuda al organismo a combatir infecciones o mitigar el estrés y la ansiedad.

Cualquier persona puede practicar Reiki, ya que es una herramienta muy poderosa que está al alcance de todos. Es una técnica que se aprende, atreves de una iniciación recibida de un Máster Reiki.

Para finalizar Silvia De La O señala que cualquier caso es bueno para recibir Reiki, ya sean enfermedades de índole físico o emocional, pues no tiene contraindicaciones porque siempre es positivo. En cuanto a la frecuencia para acudir a una sesión, todas las veces que se desee; pues una vez que se conoce dicha terapia y se comprueban sus beneficios, como encontrar la armonía y establecer la paz interior, la claridad de pensamiento, y el desarrollo de la inteligencia mental y emocional.