Después de bombardear vía sus subalternos, alentar un boicot y financiar una campaña publicitaria para bloquearla, Elba Esther Gordillo habló de frente sobre "De Panzazo".
La entrevistó el periódico español El País. Se exhibió incapaz de la autocrítica, empeñada en esconder la realidad, ocupada sólo en el dinero y los votos que representan ser la monarca del sindicato más poderoso de América Latina, amenazante.
Cuando los reporteros Luis Prados y Salvador Camarena le preguntan sobre "De Panzazo" aduce que quienes la hicimos "tienen una mala intención por adjudicarle al sindicato y a mi liderazgo la responsabilidad, y olvidan que yo tengo el deber de defender las prestaciones, la profesionalización de los trabajadores". ¿No tiene el deber de velar por la educación de los niños? Eso no figura en su lista.
¿Qué responsabilidad tiene en el fracaso educativo mexicano?, le cuestionan en la pieza publicada el fin de semana. "Es que no acepto que sea un fracaso", revira para el asombro. Lo contesta como si los exámenes internacionales no diagnosticaran que 7 de cada 10 alumnos mexicanos al terminar la secundaria no entienden lo que leen ni saben multiplicar.
Presume como logro suyo que "la cobertura escolar está llegando al cien por cien". Engaña así con que casi todos los niños se inscriben a primaria. Esconde que al terminar la secundaria (que se supone es obligatoria) más de la mitad ya desertó.
Trata de convencer de que no es su culpa, que ella no es secretaria de Educación.
- Pero tiene más poder que el secretario -ataja El País.
- Ésa es su perspectiva. Pero si poder es realizar las cosas en las que se creen, tienen razón.
- ¿Por qué entonces se achaca el problema educativo en el SNTE y en usted?
- Porque hay mala fe, hay perversión. Y de mi parte, sí hay una negligencia. Nunca me he preocupado de andar mediáticamente promoviendo las cosas.
- Pero el SNTE lanzó una campaña de anuncios para contrarrestar el documental…
- No es contrarrestarlo, es decirle a la gente: voltea a ver a tu maestro en la sierra donde hay narcotráfico, donde ha habido maestras violadas; voltea a Nuevo León a ver a la maestra que se pone a cantar con sus niños cuando se están oyendo balas y los serena… ¿Saben qué es lo que no han entendido?, perdón que alce un poco la voz… que el SNTE no es sólo una organización que defiende sus intereses, también es un garante de estabilidad política [intereses, estabilidad política… ¿y la educación de los niños?, insiste el columnista]. Nada me costaría pedir a los maestros que salieran a la calle.
Seca de argumentos, cierra con la amenaza que la ha servido para perpetuarse en el poder, la historia que ha sabido vender a presidentes y gobernadores: si no pactas conmigo, si no me sigues dando dinero y posiciones políticas, si no me cubres de impunidad, te saco a los maestros a la calle, dejo a México sin escuelas, paro el país.
SACIAMORBOS
"Me dolió ¡De Panzazo! Si eso querían, lo lograron", concluye en plan víctima. No, "maestra", no queremos que le duela la película. Queremos que le duela la realidad. Usted contribuyó decisivamente a generarla.