La dirigencia nacional del PRI prohibió a sus líderes estatales, a sus militantes y a sus simpatizantes, hacer declaraciones públicas sobre encuestas y sondeos que establezcan tendencias en el proceso de selección de sus candidatos al Congreso.
Además, de acuerdo con el manual de organización del proceso interno, se prohíbe a los futuros precandidatos aceptar dinero de autoridades municipales, estatales y federales, partidos políticos o personas de otros países, organismos internacionales, ministros de culto y de empresas nacionales o extranjeras.
El PRI ordenó a los próximos candidatos que en toda su propaganda se incluya al logotipo del tricolor, tratar con respeto a sus adversarios, a los órganos y dirigentes del partido, a sus sectores y organizaciones, al movimiento territorial y a los encargados de la conducción del proceso interno.
Advierte que los precandidatos del PRI deberán abstenerse de contratar espacios en radio y televisión.
En el apartado "principios rectores del proceso interno" se hace notar que los militantes del PRI deben velar por la unidad y agrega: "A los integrantes de los órganos ejecutivos de dirección del partido responsables del proceso de selección, así como a los miembros, militantes y simpatizantes del partido que participen en la organización y desarrollo del proceso de selección, les queda prohibido, en sus declaraciones y comunicaciones públicas, hacer referencia a sondeos, encuestas o cualquier otro tipo de estudios de opinión que establezcan tendencias de votación o anuncien presuntos resultados durante el proceso interno y antes de la conclusión de las Convenciones Distritales".