De los diálogos de Cervantes de Salazar cito lo siguiente:
"Alfaro: ¿A qué se dedicarán cuando crezcan?
Zuazo: Los dotados de ingenio, claro se aplican a las artes liberales, y los que, por el contrario, carezcan de él, a las serviles y mecánicas ; de modo que creciendo la virtud con la edad, cuando lleguen a ser grandes no se les hará obrar mal sino por fuerza.
Alfaro.- Nada es tan provechoso para la república como educar de ese modo a sus hijos, a fin de que nunca se aparten del sendero de la virtud en que una vez fueron puestos, y después encaminados.
Zuazo: Mucho contribuye a nuestra felicidad o desgracia la enseñanza que de niños recibimos y se arraigó en nosotros con los años." (México 1554, Ed sepan cuantos # 25).
Dos ideas que quiero recuperar de este texto: La primera, que no todos están capacitados para obtener estudios profesionales a nivel licenciatura. Y esto no se debe ni a la clase ni a los medios económicos que pueda tener una persona, sino a las capacidades mentales y a las habilidades que un universitario debiera de poseer. Lo que nuestro sistemita no tiene en cuenta, es que estamos sacrificando el obtener excelentes técnicos por la insistencia de que todo mundo obtenga estudios universitarios. Si a esto le agregamos el bajísimo promedio de lectura con que cuenta el mexicano, más nos damos cuenta que es un mito lo de la vocación para estudiar que podemos encontrar entre los jóvenes. Se supone que la universidad prepara, entre otras cosas, investigadores, por eso en los primeros años en muchas carreras por no decir en casi todas, te dan estadísticas, que es la principal herramienta de la investigación. Por eso al terminar, una de las principales opciones para obtener el título es la tesis, que no es otra cosa sino una investigación donde tienes que proponer una hipótesis y probarla.
El diálogo anterior se escribió en el siglo XVI y se refería a la educación que se daba en las escuelas de la nueva España, sobre todo en la pontificia universidad de México. Cervantes de Salazar fue uno de sus maestros y a través de sus diálogos nos presenta la situación de vida en aquellos tiempos.
La segunda parte del diálogo nos habla sobre la educación moral o ética del ciudadano, los principios que deberían de regir los comportamientos de las personas que han sido relegadas a segundo término en los últimos tiempos. La educación positivista, al engolosinarse con la ciencia, puso en segundo término la educación cívica que en cierta manera suplanto a la educación moral religiosa de antaño, dejando sin defensa a la juventud ante las proporciones del liberalismo donde lo único que importa es el tener y donde el fin justifica los medios.
¿Hoy en que podríamos fundamentar los valores odontológicos (o éticos)? ¿En la religión? ¿En el nacionalismo? Las dos nociones anteriores están pasando a la historia, nos suena caduco ir a misa o los honores a la bandera. No hay nada que nos comprometa con los demás, el individualismo va triunfando sobre los valores comunitarios y de esta forma nos vamos destruyendo y destruimos lo heredado por nuestros ancestros.
Sólo hace falta dar una ojeada a nuestro alrededor; la vida del ser humano se ha convertido en polvo. La cultura que se nos ofrece es la de la muerte, asesinato, la del delito. La Ciudad va perdiendo sus monumentos y a nadie le importa. Nos encerramos en colonias privadas, se ha acabado la confianza que le teníamos a los demás; el otro es mi enemigo y me destruye, tengo que vivir encerrado, la credibilidad no existe ni en las personas ni en las instituciones.
Ninguno de nuestros políticos nos ofrece opciones para acabar con la situación que padecemos. Ninguno es contundente ni tajante en mostrar una ruta que nos saque del atolladero. Ninguno tiene la clara visión de la totalidad, de la realidad, de un país que vaya hacia el futuro.
Ahora es cuando hace falta la materia gris.
Dice Zuazo en los diálogos referidos: "Según he sabido, Cervantes Salazar, uno de nuestros profesores, que en cuanto puede procura que los jóvenes mexicanos salgan eruditos y elocuentes, para que nuestra ilustre tierra no quede en la oscuridad por falta de escritores, de que hasta ahora había carecido". Hace falta ideas.
