Con esta frase comenzamos la columna. Esta idea poco conocida de una de las mentes más brillantes incita a la reflexión, a preguntarnos ¿qué hace que una persona sea inteligente?, o, ¿qué clase de libros debe leer un niño? Si tomamos en cuenta las palabras dichas por Einstein lo que hace que un niño a futuro adulto sea inteligente son los cuentos de hadas.
Poco a poco hemos perdido la costumbre de leerle a los niños cuentos de hadas, incluso como adultos este tipo de literatura suele parecernos absurda para nuestra edad o demasiado irreal. La verdad es que con el paso de los años sustituimos a los maestros de los nombrados "clásicos infantiles" como los hermanos Grimm o Lewis Carroll, por magos, zombies y vampiros. Ya no se trata de pelear contra dragones, de perseguir un conejo blanco, visitar a la abuela o de la ayuda de una gentil hada.
No estoy afirmando que las historias actuales de magos, vampiros y otros seres sobrenaturales sean malas pero tampoco del todo buenas. Debo destacar que el trabajo realizado por la escritora J. K. Rowling (en Harry Potter) convirtió a toda una generación de niños, jóvenes y adultos en lectores. Pero realmente todos estos nuevos personajes ¿qué nos dicen?, ¿cuál es el mensaje que le dejan a los lectores?
Suele subestimarse el beneficio de los cuentos de hadas en la infancia, diversos estudios realizados en el Reino Unido mencionan los siguientes: le enseña a los niños cómo resolver o lidiar con problemas, a perseverar ante las dificultades, el heroísmo (el triunfo del bien contra el mal), les brinda a los padres la oportunidad de mostrarle a sus hijos cómo ser crítico ante diversas situaciones y cuáles son las consecuencias de tomar malas decisiones, ayuda al desarrollo de la imaginación y creatividad (elementos que hemos perdido poco a poco).
Pero no se debe confundir a los cuentos de hadas con las versiones idealizadas en las caricaturas de Disney, ya que si leemos los originales, apreciaremos las diferencias entre ambas, fomentaremos la lectura y ampliaremos nuestro conocimiento en el tema.
También debo señalar rápidamente este "nuevo fenómeno" de realizar series y películas de los clásicos infantiles, es decir, las nuevas películas de Alicia en el País de las Maravillas, Caperucita Roja, Blanca Nieves, series como: la Bella y la Bestia, Grimm y Érase una Vez, entre otras. La mayoría está dirigida a un público de jóvenes adultos, se busca atraer tanto a los jóvenes como a los adultos a ese mundo que antes sólo era infantil, me parece una buena idea, aunque la mayoría de estos proyectos resulta poco eficaz, debido a que ya no tienen casi nada que ver con el contexto original del cuento o personaje y lentamente se va degradando la visión del autor, quedando una historia bastante absurda, con la justificación de "estamos llevando el cuento o historia al siguiente nivel".
Lo mejor sigue siendo leer cuentos de hadas o fantasía en su versión original, debido a que contribuyen al desarrollo de la imaginación y la creatividad, tanto en niños como en adultos brindándonos la posibilidad de soñar con nuevos mundos llenos de magia, romance, amistad, justicia, llenos de éxito ante la adversidad. Para finalizar dejo esta frase de G.K. Chesterton (escritor británico): "Los cuentos de hadas no le dicen a los niños que los dragones existen. Ellos ya saben que existen. Los cuentos de hadas le dicen a los niños que se puede vencer a los dragones".
Twitter:@DianaPereyra7
