Comercio. En el Mercado de Abastos de El Refugio se preparan para las ventas de este mes.
El siglo de durango
Diciembre, el último mes del año y por mucho el de más gastos, fiestas y comida. Los comerciantes lo saben y por eso ya han surtido la mercancía que consideran necesaria para satisfacer las necesidades de su clientela.
El Mercado de Abastos de El Refugio, se mantiene como uno de los lugares predilectos de los habitantes de esta capital y de incluso de quienes radican en otras localidades.
DE TODO
Y es que aquí encuentran piñatas, golosinas, cacahuate, productos cárnicos, especias y todo lo que se necesita para la preparación del tradicional ponche.
Margarita García, empleada de un establecimiento de abarrotes, comentó que es común que cada año las filas de vehículos para ingresar al mercado lleguen hasta el bulevar Domingo Arrieta.
"Tenemos mucha gente y el horario de trabajo es más largo, hay veces que salimos a las nueve, cuando lo normal es irnos a las siete, porque además hay que acomodar todo", mencionó.
Karla Méndez, quien labora en una dulcería sonríe y suspira cuando se le pregunta si es mucho el trabajo que les espera, a lo que asiente con la cabeza y comenta que sobre todo a partir del 15 de diciembre aumenta la clientela.