En su visita por la Región Lagunera, el gobernador del Estado de Durango, Jorge Herrera Caldera evadió el tema de los filtros intradomiciliarios contra el arsénico cuya instalación no ha iniciado, pese a lo anunciado por la CAED en días pasados.
A pesar de los insistentes cuestionamientos de los medios de comunicación, Herrera Caldera esquivó las preguntas y en última instancia, presuroso por encabezar la "tamaliza" por el Día de la Candelaria, se concretó a responder que ya habían empezado a colocarlos en el medio rural.
"Les voy a mandar a Miguel Calderón (director de la CAED) para que les dé la información puntual", dijo cuando se le preguntó sobre la ubicación de las comunidades donde supuestamente ya habían comenzado a trabajar.
Como se informó con oportunidad, el pasado 19 de enero, el director de la Comisión de Aguas del Estado de Durango (CAED), Miguel Calderón Arámbula, anunció que ya estaba en marcha la instalación de los dispositivos para remover el arsénico del agua que consumen habitantes de Gómez Palacio, Lerdo, Tlahualilo y Mapimí.
Sin embargo, autoridades de los cuatro municipios desmintieron al funcionario estatal asegurando que no había un solo dispositivo instalado en ninguna comunidad.
La primera etapa del programa contempla la instalación de diez mil filtros en igual número de viviendas, de un total de 40 mil, con recursos del Fondo Metropolitano.
