El candidato del PRI, Enrique Peña Nieto excluyó el tema de la deuda coahuilense de más de 37 mil millones de pesos en su reunión con empresarios coahuilenses. (Archivo)
Durante la visita a la capital de Coahuila, el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto excluyó el tema de la deuda coahuilense de más de 37 mil millones de pesos en su reunión con empresarios coahuilenses.
Ante el cuestionamiento sobre el tema del caso Javier Villarreal comentó que debe de castigarse a los culpables “sean quien sean”.
Por el contrario en su discurso expresó que el país debe de contar con una banca nacional de desarrollo agresiva.
“Hay que tener impuestos justo que puedan pagarse”, precisó.
En relación al tema de seguridad dijo que la violencia se ha expandido a varios estados de la república y el número de pobres se han incrementado.
“Hay que combatir el secuestro, el homicidio y la extorsión de manera coordinada con los tres niveles de gobierno, no compitiendo como muchos lo hacen”, manifestó Peña Nieto.
El primer evento que sostuvo el candidato presidencial tuvo lugar en un salón de eventos ubicado al norte de la ciudad donde se reunión con 500 empresarios, aproximadamente.
Al evento acudieron el gobernador de Coahuila Rubén Moreira, su esposa Carolina Viggiano, así como los alcaldes de Torreón y Moncloa, Eduardo Olmos y Melchor Sánchez, además del gabinete estatal.
En punto de las 17 horas se llevará a cabo un evento masivo en el parque Las Maravillas donde se espera arriben alrededor de 10 mil simpatizantes.
Visita de Peña Nieto ocasiona trifulca
Durante la reunión con empresarios el movimiento social Indignados Coahuila acudieron al evento para manifestarse con pancartas en donde recriminaban la opacidad del gobierno priista en Coahuila, lo que provocó que fueran agredidos físicamente por simpatizantes de Peña Nieto.
Integrantes del movimiento Indignados Coahuila aseguraron que trataron de colocar mantas en los puedes peatonales cercanos al lugar donde se presentaría el candidato presidencial, sin embargo comentan que elementos de seguridad del estado les impidieron posicionar los cartelones, mientras que simpatizantes priistas sí pudieron acceder a los puentes y colocaron cartelones para dar la bienvenida a Peña Nieto.
“Esto es un indicio de la represión que dominará a México si Peña Nieto gana la presidencia”, aseveró uno de los Indignados.
