Pescadores de alta mar, autoridades de Salinas del Marqués, Playa Brasil, Guelaguichi y La Escondida, así como restauranteros, exigieron a la Secretaría de Marina que aplique el plan de contingencia para controlar el derrame de petróleo suscitado tras el hundimiento de la monoboya número 3, propiedad de Pemex, en aguas del Pacífico.
Los afectados señalaron que "la contaminación afecta el entorno marino que nos rodea, en perjuicio de nuestras actividades pesqueras, turísticas y de servicios" y cuestionaron por qué se pretende minimizar la gravedad del desastre ecológico.
Criticaron a los alcaldes Gerardo García Henestroza, de Salina Cruz y José Luis Villalobos, de Tehuantepec, "por su actitud omisa ante la gravedad, que quedará en la historia de Salina Cruz, como una de las contaminaciones más grandes de Pemex".
