Familiares de cinco jóvenes muertos por un incendio en una cárcel para menores en Panamá exigieron hoy justicia a un año de la tragedia cuyos principales responsables son nueve policías y la ex directora del correccional juvenil Iris Cedeño.
Parientes de los fallecidos colocaron desde el amanecer de este lunes velas encendidas a las puertas del Centro de Cumplimiento de Menores además de poner pancartas con consignas de justicia en la cerca alambrada del penal.
Fotografías de los cinco jóvenes fallecidos también acompañaron la protesta pacífica, a un año del incendio ocurrido en el penal para menores infractores en la capital panameña.
'Pedimos justicia, un año hasta hoy y no ha pasado nada', indicó uno de los familiares presente en la manifestación.
Siete jóvenes, cinco de los cuáles murieron, resultaron con quemaduras, graves por un incendio generado en la prisión a raíz de un motín.
Investigaciones de la Fiscalía determinaron que una bomba lacrimógena lanzada por agentes policiales desató el incendio en una de las celdas donde estaban atrincherados varios jóvenes.
Por este caso están procesados nueve policías, dos custodios del centro y la ex directora del centro, Iris Cedeño.
El juicio contra los acusados está pendiente de realizarse debido a que aún están pendiente de respuesta varios recursos legales.
El abogado de los policías acusados, Benito Mojica, demandó la semana pasada la nulidad del proceso al argumentar que el informe sobre la bomba lacrimógena fue elaborado por una persona sin las credenciales de perito.