Efectos. Ante la polémica de la despenalización del aborto en algunos países se han desarrollado estudios, para observar los daños.
Las mujeres que han tenido uno o más abortos antes de su primer hijo tienen un mayor riesgo de sufrir un parto prematuro, según un estudio publicado ayer por la revista médica británica Human Reproduction.
Científicos finlandeses contabilizaron un mayor número de partos prematuros y otras complicaciones relacionadas con el peso de los bebés entre aquellas mujeres que habían tenido uno o más abortos antes del embarazo.
"Nuestros resultados sugieren que los abortos inducidos antes del primer parto, en concreto tres o más, están asociados con un incremento marginal del riesgo de parto prematuro", explicó Reija Klemetti, autora principal del estudio, quien precisó que este hallazgo no debe alarmar a las mujeres pues el aumento es "muy pequeño".
La investigación fue llevada a cabo por el National Institute for Health and Welfare de Helsinki, Finlandia entre 1996 y 2008 y en ella participaron 300 mil 858 madres, según detalla esta publicación de la Universidad de Oxford.
Así, el riesgo de dar a luz prematuramente, antes de las 28 semanas de gestación, era tres veces mayor entre las mujeres que habían tenido tres o más abortos, lo que a su vez incrementa el riesgo de los bebés de sufrir daños cerebrales o discapacidad.
Los investigadores observaron además que estas mujeres tenían un 35 por ciento más de posibilidades de dar a luz antes de las 37 semanas de gestación y un 225 por ciento más de riesgo de que su hijo naciese con "muy poco peso".
Según Klemetti, el porcentaje de partos prematuros antes de las 28 semanas entre mujeres que nunca han abortado es de tres por cada mil.
Sin embargo, esta cifra asciende a cuatro entre las mujeres que han tenido un aborto, a seis entre las que han tenido dos interrupciones y a once entre las que han tenido tres o más.
Además algunos abortos espontáneos pueden ser causados por una excesiva fertilidad en las mujeres. Esto según un equipo de investigadores ingleses y holandeses, los cuales aseguran que algunos úteros aceptan embriones que normalmente serían desechados.
Las mujeres que han sufrido algún aborto espontáneo creen que su cuerpo ha rechazado el embrión, lo que les provoca sentimientos de culpabilidad. Pero este descubrimiento devela que más bien se trata de una alta fertilidad que acoge embriones débiles, de acuerdo con BBC MUNDO.
El estudio publicado en PLoS ONE se basó en muestras de úteros de seis mujeres con embarazos normales y otras seis que habían tenido uno o varios abortos. A estas muestras se les colocaron embriones con diferentes calidades. Los resultados mostraron que las células de mujeres con una fertilidad normal crecieron eligiendo los embriones de mejor calidad, sin si quiera tomar en cuenta al resto. En cambio las células de mujeres con una alta fertilidad crecieron con todos los embriones.
