El papa Benedicto XVI expresó “gran dolor” por el sismo de 5.8 grados en la escala de Richter que golpeó esta mañana la norteña región italiana de Emilia-Romaña y dejó un saldo de al menos 13 muertos.
“Estamos golpeados y emocionados todos, supe que murió un párroco en Carpi, así como otros obreros. Sobre este asunto existe gran dolor y participación de parte del Santo Padre y de todos nosotros”, dijo el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.
Durante un encuentro con periodistas, precisó que el movimiento telúrico no obligará a modificar la visita del líder de los católicos a la ciudad de Milán, no muy distante de la zona afectada, prevista para el viernes próximo.
“No tengo información sobre posibles cambios en el viaje del papa, lo ocurrido es muy doloroso y penoso, pero no me parece que haya afectado la ciudad de Milán, por lo tanto no creo que se den modificaciones”, apuntó.
Del 1 al 3 de junio próximo, el líder máximo de la Iglesia católica viajará a esa localidad del norte de Italia con motivo del VII Encuentro Mundial de las Familias, una cumbre internacional que congregará a miles de católicos de los cinco continentes.
El sismo de este martes se registró a las 09:00 horas locales (07:00 GMT) con epicentro en la provincia de Módena, informó el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV).
El movimiento fue seguido de varias réplicas, entre ellas una de 4.7 grados Richter a las 10:27, otra de 4.2 a las 10:40 y una más de 3.9 a las 11:30 horas.
