El Parque Bicentenario, construido en 2010 para conmemorar los 200 años de la gesta de la Independencia, fue el escenario para que los católicos del país y de diversas partes del mundo se unieran para escuchar al Papa Benedicto XVI.
Cada uno de los asistentes tiene su propia historia para estar presente en este parque guanajuatense, y de cómo consiguió llegar a este recinto, en donde el jefe de la Iglesia católica presidió el rezo Angelus Domini.
Desde Mazatlán, Sinaloa y sin boletos para la misa papal, Carlos Domínguez y su familia acudieron al Parque Guanajuato Bicentenario, y al final quedaron más que satisfechos.
"Teníamos que venir, no había de otra, nos venimos en camión, sin boletos porque no tuvimos la suerte de ser seleccionados en nuestro templo, y la idea era venir a escuchar el mensaje del Papa, pero fue tal sorpresa que lo vimos muy de cerca", comentó Carlos Domínguez.
Estuvieron a pocos metros del obispo de Roma, gracias al recorrido que hizo el Papa en el vehículo vidriado conocido como papamóvil, entre los 500 mil asistentes.
El Papa de la gente, Benedicto XVI renovó la fe y esperanza de multitudes reunidas en el Parque Bicentenario.
Guanajuatenses, yucatecos, bajacalifornianos, tamaulipecos, queretanos, chihuahuenses... en fin, creyentes católicos de todo el país, abarrotaron el parque.
Antes de iniciar la misa, el Papa recorrió todas las zonas del lugar, donde había un pedazo de cada rincón de México.
Mercedes Salazar, avecindada en León, pero originaria de Tamaulipas, consiguió un par de boletos de último momento.
"Ya me había hecho a la idea de quedarme en casa y ver la misa en la televisión, porque en mi parroquia ya no había boletos, pero de última hora me avisaron que tenían dos y me vine con mi nuera, estoy muy emocionada de estar aquí", externó.
Anoche, al llegar a la Central Camionera, una empresa de autobuses les ofreció el traslado gratuito al parque, siempre y cuando mostraran el boleto de acceso.
Ni el frío de la madrugada ni el fuerte sol del medio día, doblaron a los asistentes al Parque Bicentenario.
Carlos Moreno es originario de Puebla y también sufrió para asistir. Junto a vecinos de la parroquia de Tepeaca viajaron en un camión que rentaron para venir a conocer al Papa.
"Sería grandioso para nosotros, esperemos un día tener la visita del Papa Benedicto".