Siria expulsó a los embajadores y encargados de negocios de unos 17 países occidentales, en respuesta a una medida similar tomada la semana pasada contra los diplomáticos sirios tras la matanza de 108 personas en la ciudad de Houla.
Siria declaró personas no gratas a los embajadores de Estados Unidos, España, Reino Unido, Francia, Turquía, Italia y Suiza, así como a los encargados de Negocios de Alemania, Bélgica, Bulgaria y Canadá, además de a otros diplomáticos que laboran en Damasco, informó la cancillería.
“La República Árabe Siria todavía cree en la importancia del diálogo basado en los principios de igualdad y respeto mutuo entre los Estados”, señaló el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado divulgado por la agencia de noticias SANA.
“La diplomacia es una herramienta esencial para la comunicación entre las naciones para resolver conflictos y problemas”. “Esperamos que los países que han tomado esas medidas adopten estos principios para permitir la vuelta de las relaciones a la normalidad”, indicó.
La semana pasada, esos Estados, además de Japón y Holanda, expulsaron a los embajadores y encargados de Negocios sirios, como una medida coordinada para presionar al régimen de Bashar al-Assad, tras la matanza de 108 personas -incluidos 49 niños y 34 mujeres- en Houla.
Aunque la mayoría de los diplomáticos no se encuentra en Siria debido a la violencia, la acción de las autoridades sirias responde a una medida similar adoptada por los países occidentales por la masacre cometida en pasado 25 de mayo en Houla, en la provincia de Homs.
Estados Unidos y la oposición siria responsabilizaron a las fuerzas de al-Assad de la matanza en Houla, sin embargo el régimen sirio aseguró que la masacre fue cometida por grupos opositores armados con el fin de justificar una intervención extranjera en el país.