Extreman seguridad para los Obispos
Por: Luz Zárate
Para los empleados y huéspedes del Hotel Crowne Plaza de León, es un misterio el hombre que duerme en la habitación 516. Nadie ha visto a este hombre, sólo saben que es “la mano derecha del Papa” y ahí no pueden entrar, del resto de hombres que lo acompañan sólo saben que son Cardenales, pero si los encuentran de frente no los reconocen.
“Hay mucha seguridad ahí afuera de la habitación 516, hay muchos del Estado Mayor, nos dijeron que está la mano derecha del Papa y que ahí no nos acercáramos, sólo va personal que está ya muy bien acreditado. Pero mi pregunta es: ¿si son sacerdotes amorosos que quieren estar cerca del pueblo?, ¿porqué no nos dejan acercarnos?”, dijo Julio Jiménez.
La Comitiva que acompaña al Papa Benedicto XVI, así como los Cardenales que viajaron a León para estar con él durante su gira por Guanajuato, están hospedados en el Crowne Plaza y están sumamente vigilados por elementos del Estado Mayor Presidencial y por elementos de seguridad del Vaticano. No permiten siquiera que los huéspedes del hotel se acerquen, a menos que ellos lo autoricen.
“La verdad no sabemos quién sea quien está ahí, como uno no los conoce, pues de nombre no sabemos quién es, pero es un señor muy importante el del 516, el mismo que iba en el Papamovil con el Papa, ese señor que dicen que es muy importante y que lo acompaña para todos lados”, platicó la señora de la limpieza.
La seguridad que requieren los Cardenales –entre ellos el de México Norberto Rivera- y la Comitiva del Papa, originó que ayer el Hotel estuviera sitiado por elementos del Estado Mayor Presidencial, del Ejército, de Policías Federales, de tránsitos y policías municipales, además de contar con una unidad médica del Seguro Social.
Afuera del hotel hay vallas que impiden que la gente se acerque, y ya en el lobby hay un puesto de revisión por el que forzosamente pasan todos los huéspedes, pero ayer la seguridad se volvió extrema, sobre todo al momento que salen los Cardenales.
Ayer todo el grupo de Religiosos, salió para acompañar al Papa Benedicto XVI a Guanajuato, previo a la salida llegó al hotel el Gobernador del Estado, Juan Manuel Oliva acompañado de su esposa Martha Martínez y sus hijas; durante poco más de media hora estuvo reunido con los jerarcas de la Iglesia Católica, y posteriormente esperó algunos minutos sentado en el lobby.
Al salir, la comitiva del Gobernador llevaba una estatua de Cristo Rey.
En el mismo Hotel está hospedada la Canciller Patricia Espinoza, quien también es fuertemente resguardada.
Casi una hora después salieron los Cardenales en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, para reunirse con el Papa Benedicto XVI.
Sin embargo, tanta movilización y la presencia del Mandatario Estatal, resultó criticable para los empleados y algunos huéspedes, pues los gastos se están cargando a Gobierno del Estado.
Para algunos de los huéspedes, es una bendición estar en el mismo lugar donde están los hombres que en el rango religioso están debajo del Papa, pero otros visitantes están molestos porque en teoría venían a descansar y su tranquilidad se vio mermada por la extrema seguridad.
“Es una bendición estar en el mismo lugar donde están los Cárdenales, pero me pregunto, porqué no nos dejan ni entrar a nuestra habitación, pues porqué tanto dinero destinado a este evento”, preguntó Lorena Lemus, turista del Distrito Federal, y a quien dejaron afuera del Hotel, mientras que salía la comitiva papal.
