El grupo mexicano que trabaja en el colisionador ALICE del LHC desarrolló dos detectores que permiten observar bosones de Higgs de una forma más limpia. NOTIMEX
El grupo mexicano que trabaja en el colisionador ALICE del LHC desarrolló dos detectores que permiten observar bosones de Higgs de una forma más limpia, señala Gerardo Herrera, líder del grupo mexicano que trabaja en el CERN.
Aunque ALICE no es un experimento planeado para detectar al Higgs, puede estudiar el mecanismo con que se produce en la colisión de protón, mediante un proceso donde éstos no se llegan a tocar, lo cual implica un método mucho más limpio. “Tan limpio que solo aparece el Higgs en el detector”.
Herrera mencionó que el detector mexicano, que desde diciembre pasado está trabajando en el ALICE, ya se está implementando en el CMS y ATLAS, porque este método de física llamada difractiva facilita el análisis del bosón de Higgs.
El grupo mexicano integrado además por Ildefonso León, de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y Daniel Tapia y Verónica Canoa, del Cinvestav, instalará otros dos detectores difractivos a lo largo del haz del Gran Colisionador de Hadrones.
