Sin solución. El Gobierno está dejando morir al campo lentamente, sin importarle la alerta climática que vive el país, acusa el Frente Campesino para la Atención de la Sequía.
Desde el pasado 24 de enero el presidente Felipe Calderón emitió el decreto con medidas de excepción para la liberación inmediata de 33 mil 827 millones de pesos, y atender así a mil 200 municipios de 19 estados que son estrangulados por la falta de lluvias desde hace 18 meses en la región norte del país. Pero a la fecha la Sagarpa, Sedesol, la Semarnat, Conagua y la Secretaría de Hacienda son incapaces de cumplir con el Programa Integral para la atención de la Sequía 2012, señaló Roberto Gallegos.
El consultor en mercados agrícolas y también representante del Frente Campesino para la Atención de la Sequía, enfatizó que a pesar que el decreto establece con claridad la excepción en cuanto a la excesiva burocracia y tramitología que existe en los programas del Gobierno Federal, como los estudios de impacto ambiental para la perforación de pozos, los secretarios de Estado, así como sus correspondientes delegados federales "duermen el sueño de los justos" a la espera que estalle el problema.
"Lo más preocupante es que de acuerdo con el servicio de información meteorológica mundial de Bruselas, Bélgica, el ciclo de sequía intensa en el norte de México por lo menos durará dos años más, por lo que si llegaran a fallar las precipitaciones y por ende las expectativas de producción de alimentos en el próximo ciclo agrícola, la hambruna y la falta de agua podrá provocar efectos catastróficos", advirtió.
Delgado Gallegos precisó que ante un problema de esta dimensión, el Gobierno Federal debió responder de inmediato con recursos extraordinarios y urgentes; sin embargo, la administración que encabeza Calderón Hinojosa le dio la espalda a las miles de familias afectadas por la aguda y grave sequía, y en su momento les negó el fondo de 10 mil millones de pesos autorizados por el Congreso Federal.
"Es aberrante que a pesar de que los citados recursos económicos que no han bajado a las entidades afectadas, corresponden al presupuesto normal aprobado por la Cámara de Diputados, aún los tenga retenidos la Secretaria de Hacienda", acusó.
El también exfuncionario estatal del ramo agropecuario agregó que desde hace más de siete meses los campesinos esperan que el Gobierno Federal otorgue los recursos para los programas de empleo temporal, la perforación de pozos, el abasto de agua potable y alimentos, por lo que las pérdidas ya superan los 17 mil millones de pesos.
"El Gobierno está dejando morir al campo lentamente, sin importarle la alerta climática que vive el país, la emigración de su gente, la miseria que deja la sequía, los problemas de salud de la población, y los efectos en el medio ambiente como la extinción de especies", insistió.
Por lo anterior destacó que ante la cerrazón del Gobierno Federal, es importante que todas las organizaciones de productores alcen la voz y organicen una caravana a la Ciudad de México para darle a conocer a la nación el problema de sed y hambre que padece Durango y exigirle a las autoridades la liberación inmediata del presupuesto autorizado para hacerle frente a la sequía.