Tradición. Miles de fieles van a Catedral cada año para encomendarse al Santo Patrono de la ciudad.
Durango
"San Jorge Bendito amarra tus animalitos con un cordoncito bendito para que no nos piquen ni a mí ni a mis hermanitos" es la frase con la que los fieles católicos recuerdan en este día al Santo Patrono de Durango.
Cada 23 de abril, entre 15 mil y 20 mil personas llegan a la Catedral con un ramito de flores, velas o alguna otra ofrenda o artículo para bendecir y se encomiendan para no ser picados por algún animal ponzoñoso durante esta temporada de calor. Esa es la tradición que, por años, se ha transmitido de padres a hijos.
Asimismo, hoy los comerciantes aprovecharán para instalarse a las afueras del templo para intentar vender sus mercancías.
La devoción por San Jorge Bendito llegó a la ciudad de Durango en 1749, con el obispo don Pedro Anselmo Sánchez de Tagle, quien ordenó esculpir una imagen en madera estofada. La escultura es policromada y encarnada, luciendo San Jorge un caballo blanco, y teniendo bajo los pies del equino a un dragón, símbolo del mal.
En el mismo año se le nombró Santo Patrono de la Ciudad de Durango. Ante la desesperación del pueblo por el alto índice de picaduras de alacrán, se optó por creer fielmente en la intercesión de San Jorge ya que en esos tiempos no existía medicamento.
JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ / El Siglo de Durango
