Reflexión sobre Dios
Hace aproximadamente cincuenta años, los que íbamos a misa escuchábamos a la hora del Evangelio alusiones de que quien no profesaba nuestra religión se encontraba fuera de Dios.
Afortunadamente en un concilio ecuménico se corrigió esta tremenda falsedad y se inició una amplia apertura con todos los que profesaban una diferente religión.
Considero que existe un solo Dios para todos y que se ha manifestado de diferentes maneras para acoger a todos sin importar razas, tradiciones, color de piel, etc., esto sin importar que a Dios lo llamen de diferente forma.
Los musulmanes son quienes más plegarias elevan a Dios. Sería injusto de parte de Dios, que no escuchara sus plegarias por considerarlos hijos de segunda.
En varias ocasiones Dios ha permitido que la VirgenMaría se manifieste para dar esperanza y considero a quienes sufren.
Un ejemplo lo tenemos dn nuestra Virgen de Guadalupe quien escogió a un humilde campesino para pedir a través de él que se construyera una iglesia para dar un lugar a los que sufren, donde le pudieran contar sus penas.
Acostumbrados a la burocracia reinante en la Tierra, hay quienes no pueden concebir que una plegaria a la Virgen o a un Dios diferente a Cristo le llegue directamente a Él, sin esperar a que el intermediario se lo comunique.
No todas las plegarias tienen una respuesta positiva o milagrosa, mas el comunicar nuestras penas a la Virgen o a Dios nos reconforta en la confianza de ser escuchados.
En estos días se conmemora la Crucifixión de Cristo, hago una reflexión para que glorifiquemos el sacrificio de Cristo por nosotros, acercándonos al prójimo sin importar religión, estrato social, raza o color de piel.
Juan Muñoz.
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Olmos des-califica a Sociedad Civil
El señor funcionario dice que será tolerante y respetuoso, y en su misma expresión de veintiséis palabras, anula y descalifica la postura de los ciudadanos. Incongruencia, desconexión o sólo malicia?. Y bueno es de esperarse, eso es lo que mejor saben hacer y decir los “príncipes” de la política partidista, que no de la política noble, afirmativa y constructiva de las sociedades y de los ciudadanos.
En este corto párrafo, critica la productividad y las aportaciones de los ciudadanos, pero no reconoce y asuma que él, lo que administra, gasta y derrocha son nuestros recursos, nuestros productos, nuestra aportaciones...no los recursos de él o de grupo su político.
Como ciudadano, creo firmemente en que antes de ponernos al nivel de ellos, podríamos y deberíamos prepararnos más, asumir nuestras debilidades y transformando en fortalezas e iniciativas más participativas, más democráticas, más dignas de nuestras familias y de nuestra comunidad. Podemos hacerlo? Claro, ya iniciamos, cierto?
Gerardo Ibarra Solís.