El gran ausente
Han pasado algunos días de la visita del candidato presidencial del PRI a nuestra entidad, visita sin pena ni gloria. Sucedió lo ya previsto, rehuyó a la prensa local, al igual que hablar de la deuda y excusó a Rubén Moreira, por su asistencia al evento, recalcando que el día no era hábil.
Fuera de la manifestación pacífica de algunos ciudadanos en contra del candidato, los cuales fueron agredidos por simpatizantes y colaboradores de Hilda Flores Escalera. Nadie comentó la ausencia de Humberto Moreira.
¿Por qué Humberto Moreira Valdés no asistió a ningún evento de Enrique Peña Nieto en su gira por Saltillo? Incluso, ¿por qué su ausencia en la gira que hizo por la entidad el candidato presidencial de su partido, en fechas pasadas con motivo de grabar sus promocionales?
Sí está en Saltillo, como aseguran algunos de sus seguidores, no tenía excusa para no haberse presentado, o ¿acaso son verdad los rumores de que se encuentra, desde hace tiempo, en el extranjero?
Porque si de algo están urgidos los partidos políticos, es de contar dentro de sus filas con personalidades que realcen su prestigio y den sentido y credibilidad a sus propuestas.
Qué partido o candidato no se sentiría honrado de que en sus filas, en sus giras y eventos contara con el respaldo de hombres y mujeres honorables, distinguidos por una vida social y trayectoria profesional honesta, transparente, respetuosa de las leyes, promotora de la justicia y la libertad, pero sobre todo, personas congruentes del hacer con el decir.
Líderes naturales, no hechos a la fuerza o por capricho de algún ocurrente, aspirante a deidad.
Estoy seguro, que aquel partido que aglutine la mayor cantidad de ciudadanas y ciudadanos distinguidos, logrará, sin necesidad de acarreo, coacción o prostitución, ganarse la confianza y atraer de manera natural a los ciudadanos.
Si de acuerdo con los comentarios, muestras de apoyo, declaraciones y el sinnúmero de acciones, programas y obras realizadas con eficiencia y eficacia; así como el uso responsable y transparente de los recursos públicos, que se dice se hicieron en la administración pasada, cabe la pregunta.
¿Por qué tan distinguido ciudadano, además de icono del priísmo local y nacional, no estuvo presente en tan importante y trascendente evento para el candidato presidencial del PRI?
Si es cierto que el candidato presidencial tiene planeado regresar nuevamente a nuestro estado, específicamente a la Región Lagunera, pregunto, ¿le girarán invitación o acaso le rogarán a Humberto Moreira para que en esta ocasión asista? ¿El ilustre coahuilense se dignará a presentarse para realzar y reforzar dicho evento?
Me atrevo a contestar estas últimas preguntas sin temor a equivocarme: claro que no lo invitarán, al contrario le sugerirán y recomendarán, que aún no es tiempo de que reaparezca, no sea que su imagen de hombre honorable y pulcro sea manchada.
Es mejor esperar a que pasen las elecciones, y hacer un evento a su altura y como al señor le gusta, su retorno a la escena política, debe ser triunfal, al ritmo del Ausente cantada, of course, por Cornelio Reyna, el verdadero hijo del pueblo.
Claro, esto dependerá del triunfo del PRI en los comicios del 1º de julio de 2012, del cual, usted tiene la última.
Jesús Gerardo Puentes Balderas,
Torreón, Coahuila.