La bendita democracia mexicana
A propósito de la coyuntura politica actual, donde se avecina la elección presidencial, la bendita democracia pone al nuestro alcance una rica variedad de opciones; que, aunque de orígenes un tanto diferentes, tienen algo en común: un desmedido amor por México. Los cuatro aspirantes se mueren de ganas de servir a su país y serían capaces de vender su alma al diablo por tener la oportunidad de hacerlo. No cabe la menor duda de que desean situar a México en una posición de privilegio en el contexto mundial y que desean el bienestar y la felicidad de la gente.
Si el elegido es Peña Nieto, damos por descontado que “sí va a cumplir” como dice su slogan. Se pondrá la camiseta de México y nos conducirá por senderos de progreso, paz y desarrollo. Se deslindará de la negra historia del partido que lo postuló y meterá a la cárcel a todos los sinvergüenzas que hoy día gozan de una inexplicable impunidad. Arremeterá sin tregua contra los que alevosa y grotescamente endeudaron a los ciudadanos por generaciones. Impedirá tanta cosa “rara” que sucede en el país como mandar fortunas por avión, no más protección a “Preciosos” y pederastas y acabará con el cáncer de la corrupción. No más concesiones insostenibles a los sindicatos y Las Elbas, Marines, Moreiras, etc. serán parte de un pasado doloroso, pero superado.
Si gana Josefina Vázquez, tomará lo mejor de su antecesor, y como mujer que es, pondrá la dosis de humanismo y sensibilidad que le es consustancial a su género. No perderá tiempo y corregirá la estrategia anticrimen y con la ayuda del clero logrará el milagro de moralizar el sistema de seguridad nacional. No tiene la chavacanería ni frivolidad de Fox ni la tosudez de Calderón, así que todo será miel sobre hojuelas. Su declarada beligerancia con la Gordillo, indica claramente que no son cómplices, así que cabe esperar que ahora sí el sistema educativo nacional esté a la altura que el país demanda, porque les va a exigir en serio.
Ahora que si el triunfador es “El Peje”, el amor se propagará como una epidemia por todo el país; todo se verá tras el crisol de la buena voluntad y el entendimiento entre todos los mexicanos. Las instituciones serán apapachadas y los bloqueos y discursos incendiarios serán sólo historia. Cómo no creer en esa actitud bonachona, sabia y serena que AMLO destila; cómo no conmoverse con esa imagen tan impactante de ver un niño besuqueándolo. “El Peje” va a salvar a México... Le dirá -¡“chusma, chusma’’! a Hugo Chávez, Fidel Castro y Evo Morales para que no perturben su espíritu y demostrará que “chango viejo sí hace maroma nueva’’.
Con Quadri todo será borrón y cuenta nueva; cero corrupción, cero compromisos, cero concertacesiones y será una bocanada de aire fresco en este enrarecido y sofocado ambiente político mexicano.
Así pues bienaventurado el país nuestro, por estos cuatro aspirantes que aman entrañablemente a México, quieren servirlo patrióticamente y saben cómo hacerlo. Dios los bendiga y los ilumine.
Abraham Milán Rodríguez,
Ciudadano Lagunero.