Las regiones
Cuando por alguna razón podemos viajar a otras latitudes del país es triste ver cómo la Laguna se está quedando atrás en infraestructura e inversión. Cómo de algunos años para acá nuestras ciudades, más bien, nuestras regiones hermanas se van desacelerando en la carretera del progreso cual coche desvielado que no avanza más.
Ver los logros en Saltillo, en Durango, en Chihuahua, etc. nos hace pequeños ante el mundo de las oportunidades y grandes ante el mundo de los anhelos.
Anhelos que, otrora, nuestros dirigentes políticos dijeron encabezar y que a la luz del observador las cosas no pintan mejor.
¿Qué pasó con nuestros bellos parques que ante la primera helada quedaron como pollos pelones sin que hasta la fecha se logren recuperar? Las plazas ahora son plazas de sol no de armas.
¿Qué pasó con nuestros monumentos a los héroes, los amplios pavimentos, sus centros históricos, sus mercados, sus calles bien iluminadas y seguras?
¿Qué pasó con el transporte y su modernización, con la unidades deportivas, con sus maquilas e industria? ¿A dónde están? ¿A dónde se fueron?.
¿Qué pasó con el parque Disney que era para Torreón, el intermall de senderos, la gran plaza, el rescate que se iba a hacer del municipio?
¿Qué pasó con los filtros de agua domiciliarios, con los edificios proyectados y la mejora y optimización de recursos en los ayuntamientos?
¿Qué pasó con el dinero de administraciones pasadas que no se ha logrado justificar?
Ya vimos que en temas políticos la hermandad no es lo más saludable.
Estas son tan sólo algunas de las grandes diferencias de vivir en las regiones y no en las capitales donde las mejores inversiones se quedan porque allá el gobierno está más cerca de la toma de decisiones.
Allá los presupuestos sí alcanzan porque el dinero llega primero allá que a las regiones.
Allá nos dicen qué hacer.
Allá nos mandan.
Allá somos laguneros, de Durango o de Coahuila, pero laguneros.
Allá no somos de la capital...tan sólo de la Laguna.
A más de doscientos kilómetros de las capitales y a más de mil de la ciudad de México nuestras regiones se van quedando atrás en el desarrollo contextual de un país, de dos estados.
¿Porqué a las capitales no les pasa igual?
La cercanía de los tres poderes de gobierno con los ciudadanos reclama mayor atención, allá los ciudadanos van al congreso y a Palacio a exigir lo que les toca, ... aquí tan sólo hablan por teléfono.
Miguel Gerardo Rivera
Ciudadano de Gómez Palacio