Siglo Nuevo

¿Fuera brasier?

BELLEZA

¿Fuera brasier?

¿Fuera brasier?

Dra. Mayela Villarreal Reyes

Desde hace algunos años la tendencia es buscar lo natural en el arreglo personal. Pero hay de modas a modas, y no todas resultan acertadas. Una de las prácticas que va cobrando auge es abandonar el brasier, pero debes pensarlo bien antes de sumarte a ella.

La moda ‘al natural’ ha resultado muy popular en términos generales y habitualmente resulta estética y agradable, pues permite apreciar la belleza sin necesidad de que las féminas se cuelguen ‘hasta el molcajete’ hablando de accesorios, y sobre todo podemos identificar los verdaderos rasgos del rostro sin las cuantiosas capas de maquillaje que otras épocas habían impuesto. Pero el afán por abrazar ese amor por lo natural va adentrándose a otros terrenos que quizá no son muy favorecedores, al menos no para la mayoría de las mujeres.

Así, desde hace aproximadamente tres años comenzamos a notar que numerosas personalidades de la farándula empezaron a acudir a eventos públicos con vestidos que dejaban clara la ausencia de una prenda esencial en el guardarropa: el brasier. Poco a poco esa tendencia se ha ido expandiendo y hoy está presente no sólo en nuestros televisores, sino que la vemos al salir a la calle y quizá en nuestro círculo de amistades. Tal vez tú misma te has sentido tentada a dejar el ‘bra’ en casa. Si es así, antes de ‘liberarte’, te aconsejamos que leas este artículo con detenimiento.

NO SURGIÓ POR MODA

El brasier fue diseñando pensando en una manera de mantener y preservar el porte de ambos pechos. Por lo tanto, su utilización responde más a exigencias anatómicas que a los caprichos de la moda.

Esta prenda busca perfeccionar la línea natural del busto sin sacarlo de su sitio, disimularlo ni exagerarlo. Al mismo tiempo eleva y moldea los senos suavemente, sin distorsionarlos, y además ayuda a la postura en general y a tener un mejor porte. Un sostén escogido con acierto logra que incluso te veas más delgada, y simplemente beneficia tu imagen al hacer que tu busto se vea firme y uniforme.

Lo usual es que las mujeres comiencen a ponerse sujetador cuando las mamas empiezan a desarrollarse; cabe señalar que su uso no interfiere con la forma o tamaño que adoptarán.

Podemos concluir entonces que el sostén no es una ‘imposición’, como las promotoras del feminismo afirmaban en alguna época; la historia nos ha demostrado que es un aliado.

VERDAD: LO NECESITAS

Es probable que la reciente exclusión del brasier comenzara en las pasarelas, como una combinación de dos factores. Por un lado, que interfería al asomarse en incontables diseños, y por otro que casi todas las modelos suelen ser extremadamente delgadas y tienen tan poco busto que podían desfilar sin él y no preocuparse de que ‘algo’ se saliera de lugar.

Pero la generalidad de las mujeres sí necesita el soporte que ofrece el sostén, en mayor o menor medida, según el volumen de sus pechos. Mientras más grandes sean estos, más apoyo requieren. Por algo se dice que “el tamaño del busto es proporcional al de la caída”. Tener senos grandes y olvidarte del brasier equivale a despojarte de la sensualidad y la armonía.

Pero no sólo las féminas de copa abundante lo necesitan. Se considera que esta prenda es una herramienta esencial para combatir los efectos del envejecimiento ya que con el correr de los años todos los pechos van perdiendo firmeza, y el sujetador contribuye a desacelerar el ‘efecto gravedad’.

Por otro lado, muchas ignoran que el ‘bra’ juega un papel muy importante durante los ciclos menstruales, pues al atravesar dichas fases las mamas se congestionan y duelen, pero si se cuenta con un sostén apropiado (de la talla correcta), la molestia es notablemente menor.

Asimismo, durante el embarazo las glándulas mamarias aumentan su dimensión hasta más del doble. Si alguien gestante no usa brasier, aumenta la posibilidad de que le broten estrías en dicha zona. Mientras que emplearlo en la etapa de lactancia permite que los senos tengan una posición correcta, sin que su peso o el amamantamiento deterioren su forma.

Imagínate haciendo ejercicio sin ‘bra’: no sólo sentirás dolor con cada movimiento brusco sino que darás un espectáculo non grato, y además favorecerás la flacidez de tus pechos.

TÚ DECIDES

Quienes han recurrido a la cirugía plástica y por lo tanto poseen un busto extremadamente firme, técnicamente podrían darse el lujo de andar por la vida sin sostén. Sin embargo los mismos cirujanos estéticos les recomiendan no abandonarlo.

Si esta prenda pasara al cajón de la historia sería una desgracia. Las mujeres con poco pecho lo necesitan para delinear su silueta. Y todas las demás para cuidar su firmeza, especialmente las ‘bien dotadas’.

Usualmente los vestidos y blusas de todos los estilos piden a gritos un brasier para lucir adecuadamente. Es por eso que entre la gran variedad de modelos en el mercado hallamos diversas opciones de abrochamiento y tirantes, las cuales permiten emplearlos casi con cualquier atuendo. Y cuando de plano el modelo es incompatible con el ‘bra’, hay sostenes autoadheribles (copas individuales) que hacen una excelente labor.

En resumen, el sujetador permite que los senos se vean siempre en su sitio. El único momento en que se sugiere dejarlo al lado es por las noches, antes de acostarte a descansar.

Desde luego, la decisión es tuya. Si quieres presumir un busto sano por más tiempo, escoge cuidadosamente tus brasieres y apóyate en ellos. Y si tu tendencia hacia lo natural te hace verlo como un enemigo deséchalo, pero resígnate a tener el pecho caído y flácido en un corto periodo. Si no lo crees, puedes ver un claro ejemplo en las jóvenes integrantes de las tribus africanas que aparecen ocasionalmente en reportajes de National Geographic...

Correo-e: dramayela@hotmail.com

Leer más de Siglo Nuevo

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Siglo Nuevo

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

¿Fuera brasier?

Clasificados

ID: 701694

elsiglo.mx