Internacional Jeffrey Epstein Chile Israel-Palestina Donald Trump Narcotráfico

Gobierno colombiano y FARC, con voluntad de lograr la paz

NOTIMEX

El gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) iniciaron hoy formalmente en Noruega una nueva etapa de la mesa de diálogo de paz con la voluntad de poner fin a medio siglo de guerra interna.

En rueda de prensa en el hotel Hurdalssoen, en Hurdal a una hora de la capital noruega, el jefe de los negociadores del gobierno, Humberto de la Calle, y el dirigente de las FACR, Iván Márquez, coincidieron en que la paz llegará.

Las delegaciones llegaron el martes al país nórdico, y la víspera sostuvieron un encuentro privado auspiciado por el gobierno de Noruega, que junto a Cuba sirven de garantes del diálogo de paz, y en ese primer contacto se afinaron detalles para las próximas reuniones.

El integrante de la delegación de Cuba, Abel García, leyó en español el comunicado acordado por las partes, y el noruego Dag Nylander hizo lo propio en inglés, y anunciaron que el próximo 5 de noviembre se reunirán los voceros de ambas partes en La Habana, para seguir sus labores.

Al dar lectura al comunicado conjunto, García dijo que en Noruega se conformó este jueves la mesa de conversaciones para el acuerdo general para la eliminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera, cuya primera fase se anunció el pasado 26 de agosto.

Explicó que la segunda fase abordará su primer tema el 15 de noviembre en La Habana, 10 días después de que los voceros de ambas partes inicien sus trabajos para continuar lo iniciado este jueves en Oslo.

El exvicepresidente y jefe negociador oficial, Humberto de la Calle, llamó en su mensaje a las FARC a aprovechar esta oportunidad para alcanzar la paz, sin que ello signifique la rendición de sus ideas, sino su defensa a través de la participación política.

Llamó a la confidencialidad durante el proceso de diálogo, ya que las filtraciones afectan el proceso, mientras que de comenzar a dar resultados convencería a sectores aún reticentes de la sociedad colombiana a que apoyen estos esfuerzos.

De la Calle aseguró que el gobierno concibe esto como un proceso “serio, digno, realista y eficaz”, y aseguró que el tratamiento de las diferencias “debe abordarse con dignidad, trato respetuoso y digno”.

“Quizá no nos vamos a convencer en las ideas políticas. El propósito no es venir a catequizar a nadie, sino poner una agenda para deponer las armas y dar garantías para que sean una fuerza política desarmada”, manifestó.

Abundó que se coincide con las FARC “en que la finalización no es la consecución inmediata de la paz, la fase tres es hacer cosas que llevarán a esa paz, el gobierno tiene una agenda para el cambio social, una agenda progresista”.

Enfatizó que no se quiere solo un resultado que se apoye en leyes, ni que las FARC claudiquen en sus ideas, sino que luchen por ellas en la democracia.

“No queremos falsa unanimidad, pero sí crear mecanismos institucionales”, expuso de la Calle al sostener que el escenario internacional beneficia la búsqueda de la paz aún cuando falta mucho por hacer.

El número dos de las FARC, Iván Márquez, aseguró por su parte que será el pueblo el que tome una decisión, y que “no puede ser un proceso de diálogo a contrarreloj”, ya que en medio de ello están luchas sociales para cambiar el modelo económico del país.

“Venimos con propuestas para alcanzar la paz con la desmilitarización y reformas socioeconómicas profundas que refunden la democracia, la justicia y la libertad”, expresó.

“Partimos de esta visión para alertar que la titulación de tierras, que realiza este gobierno, es una trampa; encarna que el campesino una vez con su título no tenga otra salida que vender o arrendar su tierra a transnacionales y conglomerados financieros”, precisó.

Acusó que en fondo están los intereses por la producción de agrocombustibles, que en unos años nadie sabría quién es el verdadero dueño de esa tierra, y que su bancarización terminaría por desposeerlo de su propiedad.

Denunció que el gobierno colombiano solo quiere defender los intereses de transnacionales, y que además hay terratenientes que afectan el proceso de reforma agraria, entre los que mencionó al expresidente Francisco Santos, y a los hijos del exmandatario Álvaro Uribe y a otros.

Márquez apuntó que lo mismo ocurre con otros sectores como el minero, el petrolero y otros, donde los contratos solo favorecen a empresas extranjeras, y que por ello las exportaciones no llevan beneficios al pueblo.

Subrayó que “la guerra es insostenible para el Estado colombiano, cuyo gasto militar es uno de los más elevados del mundo”, y se mostró contrario a una desmovilización sin que haya una verdadera paz con justicia social.

Agregó que las FARC no son la causa, sino “una respuesta a la violencia del Estado”, por lo que pidió que responda a una lista de crímenes cometidos por años que calificó como “terrorismo de “Estado”.

Leer más de Internacional

Escrito en: FARC dialogo de paz

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Internacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 798576

elsiglo.mx