El incierto sobre el futuro del Grupo Maseca tras la muerte de su fundador, Roberto González Barrera, está provocando una dramática caída en el precio de sus acciones en medio de versiones contradictorias sobre su sobrevivencia como la principal empresa familiar del país.
La incertidumbre apunta desde una eventual salida de sus papeles en el piso de remates de la Bolsa Mexicana de Valores, donde cotiza desde 1981, hasta la remoción del presidente mundial de la compañía, Joel Suárez Saldaña, al que se le asignó el perfil de provisional, en paralelo a una reestructura integral de mandos.
Por lo pronto, la única certeza es que los accionistas familiares de la firma, encabezados por la viuda, Graciela Moreno, rechazarán la oferta del presidente del Grupo Aeroportuario del Sureste, Fernando Chico Pardo, para adquirir el 23% del capital.
Se considera que el empresario, quien ha estado muy cercano al magnate Carlos Slim, es una suerte de adelantado de éste para establecer una cuña.
El paquete, colocado en venta por la principal productora de derivados de maíz del planeta, Archer Daniels Midland, está valuado en 5 mil 102 millones de pesos.
De acuerdo a los estatutos de la empresa, los socios actuales tienen la posibilidad de derecho de tanto ante la eventual oferta de un porcentaje del capital.
En el escenario, se plantea que la familia, reforzado el control, posicione como la principal cabeza de la compañía a Roberto González Moreno.
Del otro lado de la mesa están otros dos de los hijos de González Barrera, medios hermanos, Juan González Moreno y Roberto González Alcalá. El primero preside la división Oceanía y Australia de la empresa global y el segundo México y Latinoamérica.
En la familia González Moreno está, además de Roberto y Juan, Bertha, casada con el banquero Carlos Hank Rhon, principal accionista de Interacciones.
La crisis en la multinacional mexicana llega cuando la compañía, nacida en 1949 en el poblado de Cerralvo, Nuevo León, con una pequeña máquina para moler maíz hasta convertirlo en harina, había alcanzado su desarrollo máximo, produciendo 40 variedades de su producto estelar, además de una gran cantidad de derivados.
Muerto a los 81 años el pasado agosto, González Barrera había forjado un imperio que se extiende desde América del Centro y Sudamérica hasta China, pasando por Europa, Australia y Estados Unidos.
En total, el emporio alcanza 100 países.
La primera incursión internacional de Gruma llegó con la instalación, en 1987, de una planta en Honduras, para llegar en 1993 a El Salvador y Guatemala, y en 1994 a Venezuela.
Cinco años después nacería su primera planta en Europa, localizada en Coventry, Reino Unido, para de ahí saltar a Inglaterra, Italia y Holanda.
Desde el 2005 la firma llegó a Oceanía, para iniciar operaciones en Asia en el 2006, concretamente en Shangai, China.
En la ruta llegaría una planta más en Malasia.
Con la marca Mission, lanzada en Estados Unidos, Maseca inicia la producción de productos dietéticos.
La línea llegaría a Europa y Australia.
El crecimiento colosal de la compañía explica, pues, la pelea de unos por entrar a la sociedad y de otros por mantener el emblema de empresa familiar.
La rebatiña por Gruma.
BALANCE GENERAL
Cinco resultaron ser las firmas constructoras favoritas del rey durante el sexenio que se va. Hacia ellas, el Grupo ICA, Tradeco, Ideal, Hermes y la española OHL, se orientó el 85% de los contratos.
De acuerdo al sistema Compranet, la primera, encabezada por Bernardo Quintana Isaac, se llevó el 47% del pastel, obteniendo obras y contratos por 104 mil 200 millones de pesos, o si lo prefiere 12 mil 600 millones de dólares.
A la segunda, encabezada a su vez por Federico Martínez, le tocó el 17%, con una facturación de 58 mil 200 millones de pesos equivalentes a cuatro mil 500 millones de dólares.
Impulsora del Desarrollo y el Empleo en América Latina (Ideal) del magnate Carlos Slim alcanzó el 13%, realizando obras por valor de 44 mil 600 millones de pesos; a Hermes le tocó el cinco, con contratos por 23 mil 738 millones, y a OHL, presidida por José Andrés de Oteyza, el tres, con una facturación de 10 mil millones de dólares.
Sin embargo, en el plano de proyectos de infraestructura estatal la empresa española se lleva a todos de calle.
Se le entregaron el 45% de los contratos, cuyo monto alcanzó 56 mil 840 millones de pesos, equivalentes a cuatro mil 400 millones de dólares.
El segundo lugar en este campo fue para Ideal, con una rebanada de 22%, y contratos por 27 mil 600 millones de pesos.
En la lista sigue ICA con el 10% del mercado y una facturación de 20 mil 599 millones de dólares.
OHL se ubicó dentro de las 10 empresas cotizantes en Bolsa que presentaron los incrementos más altos de EBITDA con un 70%. De acuerdo al organismo fue la firma más beneficiada en el año electoral.
Las migajas fueron para las constructoras medianas.
SE RAJÓ EL PAN
A contrapelo del discurso enarbolado por el exsecretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, el PAN finalmente fue doblegado por el PRI en el tema de transparencia y democracia sindical bajo el marco de la reforma laboral.
El aún partido en el poder aceptó que se borraran de un plumazo los artículos agregados a la Ley Federal del Trabajo en el Senado, entre ellos el 388 bis que planteaba un escenario para cerrarle el paso a los sindicatos blancos que se alquilan con las empresas para avalar contratos colectivos a modo.
Se esfumó, de pasadita, la posibilidad del voto directo y secreto en elecciones de dirigentes sindicales; la exigencia a los líderes de rendir cuentas cada seis meses, y la derogación de la famosa cláusula de exclusión que le permite a los caciques sindicales barrer con la disidencia.
Ganó el viejo PRI.
RELECCIÓN EN LA CIRT
Por inaudita unanimidad el nuevo Consejo Directivo de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión reeligió como su presidente a Tristán Canales, quien representa a Televisión Azteca.
Este permanecerá en el cargo hasta el año próximo.
En el órgano participan, entre otros, el presidente de Grupo Radio Centro, Francisco Aguirre Gómez; el vicepresidente de la cadena MVS, Alejandro Vargas Guajardo; el vicepresidente de Grupo Fórmula, Jaime Azcárraga Romandía; el presidente de Núcleo Radio Mil, Edilberto Huesca Perrotín, además de funcionarios de Televisa como Javier Tejado Dondé y del Grupo Acir, como Diego Ibarra Belmont.
