La Procuraduría General de la República (PGR) relevó a sus delegados en Coahuila, Durango y otros cuatro estados como parte de una depuración de funcionarios.
Los cambios también se dieron en Guerrero, Michoacán, Puebla y el Estado de México.
En Coahuila, el delegado Héctor García Rodríguez, tenía apenas ocho meses en su cargo, al que llegó tras otra "limpia" de funcionarios ordenada por la procuradora Marisela Morales.
La delegación de Durango se encontraba acéfala desde agosto de 2011, tras el cese de Francisco Zacarías Cabrera.
Morales nombró a Gerardo Granados Mejía como delegado en Coahuila, con sede en Torreón, y a Marco Antonio Muñoz Valdez en Durango.
En el caso de Coahuila, la delegación estuvo bajo sospecha de vínculos con el crimen organizado y la PGR detuvo a la exsubdelegada Claudia González, acusada de recibir dinero de un grupo criminal.
Las delegaciones de ambos estados han sufrido ataques por parte de grupos del crimen organizado. En abril del año pasado un grupo armado secuestró y asesinó a la subdelegada en Gómez Palacio, Claudia Avilés Yáñez.
En noviembre pasado, Víctor Manuel Martínez, subdelegado en Torreón, fue asesinado cerca de las oficinas de la PGR.
Morales dijo que la depuración en la PGR es un "proceso constante" y anunció nuevos cursos de capacitación para 264 abogados que aspiran a convertirse en agentes del Ministerio Público de la Federación.
"La sociedad mexicana exige una efectiva procuración de justicia", dijo Morales.
Las otras cuatro delegaciones donde hubo relevo de funcionarios también habían sido parte de la "limpia" realizada el año pasado.
La PGR no informó el motivo de los cambios o si los anteriores delegados fueron reasignados a otros puestos o cesados.
