Policías estatales y autoridades del municipio de Zinacantán localizaron en una cueva de montaña, un chaleco con huellas de sangre, dos pistolas -una de ellas con seis cartuchos-, que presuntamente utilizó el grupo armado que el pasado lunes pretendió asaltar un vehículo del programa Oportunidades, en el que murieron cuatro personas.
El hallazgo se realizó en inmediaciones del poblado Navenchauc, donde sería entregada parte del dinero -más de un millón 600 mil pesos-.
El chaleco ensangrentado podría pertenecer al presunto asaltante que huyó a las montañas; se desconoce si éste acudió solo al sitio o fue ayudado por otros agresores.
El hallazgo de las armas y el chaleco fue realizado tras el despliegue de búsqueda de los agresores -uno de los cuales, se presume, escapó herido- mediante un operativo de la policía estatal, de autoridades de gobierno y pobladores de comunidades de aquella región de los Altos de Chiapas.
La noche del martes policías estatales reforzaron la búsqueda y cateo en viviendas de las comunidades Nachig y Bochojbó Alto.
El lunes por la mañana, hombres pertrechados con armas de alto poder intentaron asaltar una camioneta Van, custodiada por dos policías estatales, que transportaba el dinero y sería entregado a beneficiarios de las comunidades Yalentay y Navenchauc.
En el ataque, consumado a la altura kilómetro 68 de Yalentay, fallecieron el policía Romeo "N", originario del municipio de Villa de Acala; la trabajadora de Oportunidades, Lucia Guadalupe "N", originaria de San Fernando; Francisco "N", empleado del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi) y un presunto asaltante identificado como Pedro "N", oriundo Nachig de Zinacantán.
