En la administración de Humberto Moreira no sólo se realizaron más obras viales en Saltillo, ni se generaron más fuentes de empleo que en Torreón, también se mejoró la infraestructura hospitalaria.
Mientras en Torreón en enero de 2010, el entonces gobernador de Coahuila, Humberto Moreira Valdés, anunció la construcción del nuevo Hospital General de Torreón, el cual aún no es terminado, en Saltillo se dotó de mayores recursos al Hospital Universitario además de que el Gobierno estatal donó el terreno donde se construyó el nuevo ISSSTE de alta especialidad que entrará en funciones en marzo. Esto sin contar que en la capital del Estado ya se terminó el hospital general el cual fue inaugurado por Humberto Moreira y el presidente Felipe Calderón en diciembre de 2010, en este nosocomio se invirtieron 250 millones de pesos y cuenta con 17 consultorios de medicina general y especialidades, tres quirófanos, áreas de cirugías, recuperación, dos salas de expulsión, banco de sangre, unidad de quemados y una sala especializada para problemas cardiacos.
En contraste en Torreón se avanza a marchas forzadas en la construcción del nuevo Hospital General ubicado en la carretera a Matamoros a espaldas del Manto de la Virgen, mucho tiempo la obra estuvo abandonada. Incluso no puede ser terminado el edificio. La espera será larga porque aun falta todo el equipamiento.
En Torreón el Hospital Universitario hacer una labor loable para atender a las personas de bajos recursos, que aunque deben pagar una módica cantidad pocas veces lo hacen. Las instalaciones del nosocomio evidencian sus necesidades las cuales contrastan con las de Saltillo donde el hospital parece una institución privada y el apoyo del gobierno de Humberto Moreira fue fundamental. Basta recordar que la pasada administración estatal invirtió 16 millones de pesos para remodelar y modernizar el área de quirófanos. La inversión incluyó la instalación de mesas y lámparas quirúrgicas, lámparas de exploración, del sistema digital de radiología y de la pantalla digital para revisión de imágenes radiológicas. Además, se remodelaron los espacios en una superficie de 250 metros cuadrados y se construyó un almacén para medicamentos de 60 metros cuadrados. Incluso cuenta con Servicio de Medicina Nuclear donde se instaló un equipo cuyo software permite analizar las imágenes en forma detallada para determinar con certeza el tipo de patología del paciente.
A pesar de que fue en enero de 2010 cuando se anunció la construcción del nuevo Hospital General de Torreón, no fue hasta diciembre de ese año cuando se instalaron las estructuras metálicas, pero en enero de 2011 nuevamente la obra fue abandonada.
Médicos en Torreón coinciden en señalar que es urgente que se termine la construcción de este hospital ya hay más de 300 mil personas sin derecho a los servicios médicos del ISSSTE o del IMSS.
Desde el V informe de gobierno de Humberto Moreira se evidenciaban estas diferencias ya que en el se presumía la construcción de 5 nuevos Hospitales en Coahuila. Ninguno en Torreón.
El hospital del ISSSTE evidencia el déficit de infraestructura hospitalaria que hay en Torreón. Ya que el nosocomio ubicado frente a la Alameda cuando fue inaugurado atendía a 20 mil derechohabientes. De entonces a la fecha han pasado más 50 años y ya suman casi 120 mil derechohabientes y las instalaciones son las mismas. Incluso se da atención a personas de otras partes de Coahuila, de Durango y Nuevo León.
En Saltillo la administración cabildeó con el Gobierno Federal para tener un nuevo hospital del ISSSTE el cual abrirá sus puertas en marzo, para esta obra se invirtieron más 448.7 millones de pesos de pesos y el nosocomio fue construido en un terreno ubicado en el Parque Las Maravillas del Centro Metropolitano, el cual fue donado por el Gobierno del Estado. El nosocomio ofrecerá medicina de especialidades y la población beneficiada ascenderá 80 mil 368 derechohabientes. Es decir a pesar de que es mayor la demanda en Torreón se optó por construir el hospital en la capital del estado.
De esta forma el gobierno de Humberto Moreira privilegió la infraestructura hospitalaria de Saltillo a pesar de tener una menor demanda que Torreón y que geográficamente la capital está más cerca de Monterrey donde también hay hospitales de especialidades.
No sólo las obras y las fuentes de empleos llegaron a Saltillo, también los hospitales aunque en el discurso se niegue que exista un trato desigual para las dos ciudades.
