Honor de Reyes
Uno de los más prestigiosos premios literarios a nivel mundial es el Premio Internacional Alfonso Reyes. Incluso la lista de sus ganadores puede tomarse como referencia de lo mejor que han dado las plumas contemporáneas.
El libro enriquece igualmente la soledad y la compañía... La vida muere, los libros permanecen.
Alfonso Reyes, Los trabajos y los días. Obras completas IX
Imagine usted la relevancia que debe tener un galardón que ha sido otorgado a personalidades como Jorge Luis Borges, Juan José Arreola, Alejo Carpentier André Malraux o Mario Vargas Llosa, por citar sólo algunos. Tal es el peso que tiene el Premio Internacional Alfonso Reyes, el cual se concede a figuras clave en el ámbito de las letras por su trayectoria, méritos y aportaciones dentro de la investigación literaria.
Este reconocimiento fue instaurado a iniciativa de Francisco Zendejas en 1972, aunque se entregó por primera vez hasta el 73, año en que resultó laureado el emblemático escritor argentino Jorge Luis Borges, con quien el creador mexicano sostuvo una amistad de más de 30 años. En su tiempo, el creador de El Aleph declaró sobre Reyes: “El nombre de don Alfonso Reyes evoca, no solamente el de mi maestro, el mexicano universal... renovador de la prosa castellana”.
UN HONOR INIGUALABLE
El Premio Internacional Alfonso Reyes es otorgado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), a través del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y la Sociedad Alfonsina Internacional, en conjunto con el Conarte, la Universidad Autónoma de Nuevo León, el Tecnológico de Monterrey, la Universidad Regiomontana y la Universidad de Monterrey, que sumados a otros organismos se encargan de designar al jurado que a su vez elige al beneficiario.
El prestigio de esta presea tiene su base justamente en la reputación que cosechó Reyes, originario de Monterrey, Nuevo León (1889). Vale la pena recordar que como ensayista, poeta y crítico literario, su obra ha marcado a numerosos escritores, entre ellos Carlos Fuentes y Octavio Paz, ambos ganadores de la distinción. Fuentes calificó a Reyes como “el gran clásico mexicano del siglo XX”, mientras que Paz llegó a afirmar que su trabajo era “vastísimo, elegante y complejo”, y lo consideraba “creador no sólo de una obra sino de toda una literatura”.
Y es que el legado de Alfonso Reyes es prácticamente equiparable a una biblioteca, pues abordó todos los géneros con gran maestría. Al respecto José Emilio Pacheco, también ganador, expresó en su artículo titulado Inventario para acercarse a Reyes, publicado en la revista Proceso: A quien dice: ‘Muy bien, quiero leerlo. ¿Por dónde empezar?’, hay que contestarle: Empieza por donde quieras, lee lo que te interese, considera las obras de Reyes una enciclopedia o un periódico que nadie te pide que leas de principio a fin.
Cabe decir que inicialmente para aspirar a este reconocimiento era preciso haber establecido una relación personal con el regiomontano. Hoy en día, los requisitos son “una amplia trayectoria en el campo de las humanidades; haber enfocado su talento a los diversos géneros de la escritura y difundir la cultura mexicana en el extranjero a través de su obra”.
La obra del también fundador del Colegio Nacional y del Colegio de México es muy apreciada a nivel internacional. Cuando Mario Vargas Llosa recibió el galardón en 2010, aseguró que Reyes fue “un escritor que llevó a México al mundo, y que trajo el mundo a México”.
PREMIO A LA INTELIGENCIA
En su más reciente edición, la de 2011, el poeta y ensayista mexicano Eduardo Lizalde se hizo acreedor a la presea, que se entregó en febrero de este año. De acuerdo al jurado, la selección se debió a “su extraordinario poder verbal y su sólida carrera como uno de los más destacados exponentes de la poesía en lengua española”, así como “por su invaluable labor como poeta”.
Entre la variedad de honores existentes en el ámbito de las letras, sin duda éste es uno que cualquier literato se sentiría más que orgulloso de recibir. El lagunero Vicente Alfonso, que entre sus libros publicados cuenta con Partitura para mujer muerta, explica: “En el medio literario se dice que hay autores que ganan premios y premios que ganan autores. Visto así, el Premio Internacional Alfonso Reyes es una distinción que todo escritor aspira a ganar, pues es un reconocimiento a las aportaciones que ensayistas, investigadores y editores han hecho al campo de las humanidades. Contempla a la literatura tal como la procuraba don Alfonso: alejada de la bufonería y la estupidez. Que lo hayan obtenido figuras como Fuentes, Harold Bloom, Paz, George Steiner y Joaquín Diez Canedo habla de un compromiso con la literatura inteligente que combina profundidad, lucidez y claridad en la forma de exponer las ideas”.
El académico Antonio Álvarez coincide y señala que la trascendencia de esta presea queda fuera de toda discusión: “La seriedad del Premio Internacional Alfonso Reyes está comprobada por los indudables méritos literarios y académicos de sus galardonados. Nadie en sus cinco sentidos podría cuestionar la categoría intelectual y estética de personajes como Borges, Fuentes, Gutierre Tibón y Mario Vargas Llosa. Da gusto que ese premio lleve el nombre del regiomontano universal, el humanista que demostró conocimiento hondo de la cultura clásica y fue un genuino ciudadano del mundo. Bioy Casares ha dicho que el mismísimo Borges revisaba la calidad de un texto preguntándose cómo lo escribiría don Alfonso. Eso lo dice todo”.
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