Ya no son grietas sino hoyos los que se están formando en el piso de granzón colocado a finales del 2010 en la Plaza de Armas, remodelada a un costo superior a los 20 millones de pesos. Autoridades municipales aseguran que ya no se tienen adeudos con la empresa constructora CUTSA que subcontrató la mayor parte de la obra. Mientras que la Dirección de Obras Públicas no asegura que se vayan a reparar los daños, la Tesorería Municipal tampoco aplica la fianza por vicios ocultos que, se supone, debió otorgar la constructora de acuerdo con la Ley de Obra Pública. Las fallas en el piso aparecieron a los dos meses de que concluyeron los trabajos, realizados cuando Arturo Lozano Ayala era director de Obras Públicas.