los trastornos de la visión más frecuentes son hipermetropía, astigmatismo y miopía, siendo ésta última la más común, puesto que alrededor de 45% de la población la sufre. INGIMAGE
El experto en oftalmología, Adrián Beltrán Martínez, dijo que las ametropías o trastornos de la vista aparecen en el total de la población en algún momento de su vida, por ello es importante acudir una vez al año con el médico para revisión.
El médico adscrito al Hospital General de Zona 14 del IMSS en Jalisco agregó que los trastornos de la visión más frecuentes son hipermetropía, astigmatismo y miopía, siendo ésta última la más común, puesto que alrededor de 45% de la población la sufre.
Mencionó que hipermetropía y astigmatismo son trastornos que se dan cuando a una persona le cuesta distinguir los objetos que tiene más cerca y por el contrario, distingue perfecto los que tiene a mayor distancia.
Manifestó que la miopía es el trastorno opuesto, “es decir, las personas distinguen con claridad los objetos cercanos, pero no los que se encuentran lejos”.
Explicó que las ametropías en general se dan por factores de acomodación del ojo, “todos nacemos con cierto grado de hipermetropía, porque nuestro ojo es pequeño, pero en la medida en que se desarrolla y crece este trastorno desaparece”.
Aclaró que hay casos en los que el ojo no se desarrolla, “estos son los pacientes hipermétropes, o por el contrario crece de más y es cuando aparece la miopía, que sin atención adecuada propicia una visión borrosa, irreversible aún con tratamiento”.
Indicó que entre los datos clínicos de problemas visuales destacan dolor de cabeza, enrojecimiento y ardor de ojos, molestia excesiva ante la luz y somnolencia.
Comentó que el tratamiento incluye utilización de lentes graduados con especificaciones especiales que cada paciente necesita y aunque el problema no desaparece, sí permite mejor visión, y evita que el cuadro empeore.
Expresó que estos trastornos son comunes en niños y de no tratarse a tiempo pueden generar pérdida de visión o vista cansada, por lo que si el niño presenta alguno de los síntomas, “se tropieza constantemente, le cuesta trabajo calcular distancias, hace gestos al fijar la vista o cierra los ojos al salir directo a la luz del sol es importante llevarlo a revisión médica”.