Apoyo a Assad. En la imagen se observa las manifestaciones a favor del gobierno sirio sostenida por unos cuantos.
Estados Unidos advirtió a Siria que será imposible engañar al mundo sobre el cumplimiento del inminente cese al fuego, mientras las fuerzas del régimen atacaron con fuerza el sábado varios bastiones opositores en una operación que según activistas dejó más de 100 muertos, incluidos al menos 87 civiles.
La acometida militar del gobierno tendría el propósito de aplastar a la resistencia lo más que pueda antes de que retire las fuerzas conforme al acuerdo logrado por la ONU para el cese al fuego entre las partes en conflicto.
Casi la mitad de las víctimas fatales murieron en un incursión de las fuerzas armadas en el poblado central de al-Latamneh, dijeron activistas. Un video aficionado tomado en ese pueblo mostró el cuerpo de un bebé en ropas ensangrentadas con una aparente herida de bala en el pecho. En otro video se escucha una andanada de obuses que pegan en un vecindario de la ciudad de Homs mientras el panorama de sus rascacielos estaba cubierto de humo blanco.
El presidente sirio Bashar Assad aceptó la semana pasada el acuerdo del cese de fuego, mediado por el emisario internacional Kofi Annan, para que las fuerzas gubernamentales se retiren el martes de ciudades y pueblos, y para que el régimen y los rebeldes depongan las armas a las 6 hora local (1600 GMT) del jueves. La tregua abriría negociaciones entre el gobierno y la oposición sobre el futuro político de Siria.
Sin embargo, algunos gobernantes de Occidente dudan de las intenciones de Assad debido a que ha incumplido promesas en el pasado y a la reciente escalada de los ataques contra baluartes opositores, incluyendo redadas y bombardeos en zonas civiles. El embajador de Estados Unidos en Siria, Robert Ford, colocó en Internet la noche del viernes varias imágenes satelitales que, dijo, arrojan dudas sobre la disposición gubernamental para el repliegue. "Esta no es la reducción de la ofensiva y de las operaciones de seguridad que todos aceptamos debe ser el primer paso para que la iniciativa de Annan tenga éxito", indicó Ford en la página de la embajada en Facebook. El embajador se encuentra fuera de Siria desde febrero por motivos de seguridad.
Al menos 87 civiles y 16 combatientes opositores murieron el sábado en varias partes de Siria, dijo el grupo Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña. La organización nacional Comités Locales de Coordinación puso la cifra fatídica del día entres los opositores en 121, incluyendo 59 en la zona de Hama.
La ONU estima que al menos 9,000 personas han muerto desde que la revuelta comenzó el año pasado, mientras a últimas fechas ha aumentado la salida de sirios que escapan de la violencia.
En Arabia Saudí, la Organización de la Cooperación Islámica afirmó el sábado que, según sus cálculos, casi un millón de los 23 millones de sirios necesita ayuda humanitaria.
CONDENA BAN KI-MOON
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó enérgicamente al gobierno sirio por seguir matando a civiles inocentes a pesar de su promesa de retirar a los soldados y las armas pesadas de los centros poblados antes del 10 de abril. Dijo que la situación en Siria se deterioraba rápidamente, afectado a más de un millón de personas y provocando un torrente de refugiados hacia los países vecinos. "El plazo del 10 de abril para que el gobierno cumpla sus compromisos, tal como lo ratificó el Consejo de Seguridad, no es una excusa para continuar la matanza", dijo Ban, y añadió que esas acciones violan la posición consensuada del consejo.
El jueves, el consejo de 15 miembros emitió una Declaración Presidencial en la que reclamó a Damasco que aplique plenamente la propuesta de seis puntos del enviado especial Kofi Annan para resolver la insurrección contra el gobierno del presidente Bashar Assad, que ya lleva un año.
Italia no reducirá contigencia militar
El primer ministro italiano, Mario Monti, expresó en Beirut el compromiso de su país de mantener su contribución a la Fuerza Interina de la ONU en el Líbano (FINUL) y adelantó que no tiene intención de reducir sus efectivos. Italia "está comprometida a favor de la paz, la unidad y la soberanía del Líbano. Mantendremos nuestra contribución el seno de la FINUL y no reduciremos efectivos de nuestra fuerza", dijo Monti en una rueda de prensa conjunta con su homólogo libanés, Nayib Mikati. Monti agregó que cuentan con el apoyo del Gobierno libanés para prevenir ataques terroristas similares a los cometidos el año pasado contra los cascos azules franceses e italianos.
Cinco soldados franceses y seis italianos resultaron heridos en dos ataques terroristas en el sur del Líbano en diciembre y mayo de 2011. Monti elogió, además, la postura adoptada por las autoridades libanesas respecto a Siria: "Reconocemos el espíritu de responsabilidad que caracteriza la clase política libanesa que trata de preservar al Líbano de las repercusiones de la crisis siria", afirmó.
Por otro lado, Mikati deseó que Italia "prosiga su papel en la instauración de una paz permanente y global en Oriente Medio" y aseguró que la clave reside en la solución del conflicto israelí-palestino.
Durante la visita de un día, Monti se entrevistó también con el presidente libanés, Michel Suleiman, y con el jefe del Parlamento, Nabih Berri, antes de trasladarse al sur del Líbano donde visitó al contingente italiano y se reunió con los responsables de la FINUL, bajo mando en la actualidad del general italiano Paolo Serra.
