Impulsa una cultura de cuidados a favor de los animales

Desde hace varios años, Anet se dedica a dar protección a los perros enfermos o maltratados. A veces su trabajo altruista provoca críticas, pero está convencida de que los animales, como cualquier ser humano, también tienen derecho a recibir un trato digno.

Anet Silveyra Dingler tiene 25 años de edad y es presidenta de la asociación civil Huellitas de Amor, la cual se dedica al cuidado de los perros y a fomentar una cultura de respeto a todos los animales.

"Me animé a fundarla al ver que nadie hace nada por los animales, si atropellamos a un perrito lo dejamos ahí sin importar que queden lastimados. En algunos casos tienen sarna y las personas en lugar de ayudarlos les echan agua o los corren de su casa, los maltratan mucho, y por esas necesidades físicas y afectivas surge este organismo".

Ante la imposibilidad de los animales para comunicarse, Huellitas de Amor se ha convertido en su voz para llevar un mensaje de amor y respeto porque como cualquier ser vivo, también sienten.

La asociación tiene dos años, pero el trabajo de Anet tiene más tiempo porque desde niña se interesó en el cuidado y la protección de los animales.

"Desde niña conviví con todo tipo de animales: conejos, becerros, perros, tortugas, de todo, y además mi abuelo me heredó su amor por los perros. Mi casa siempre está llena de mascotas".

Para crear una cultura de cuidado a los animales, Anet visita escuelas públicas y privadas de todos los niveles educativos, con el objetivo de que los alumnos aprendan a respetarlos y a convivir con ellos sin lastimarlos.

"A los adultos es más difícil cambiarles la mentalidad, por eso enfoqué mi trabajo en los niños, adolescentes y jóvenes, y la verdad es que he tenido muy buena respuesta porque entienden que los animales son seres vivos que necesitan afectos y cuidados".

Es importante, dice, que las personas se pongan en el lugar de los animales, "imagínate que nosotros estuviéramos todo el día en el patio o encerrados en un cuarto, obviamente pediríamos auxilio y cómo nos sentiríamos si nos ignoraran, por eso trato de crear una conciencia de respeto entre la sociedad".

El maltrato a los animales consiste en tenerlos amarrados o encerrados todo el día, golpearlos, no darles de comer ni atención médica.

En una ocasión, Anet observó cuando un señor golpeaba con una cadena a una perrita casi en los huesos por falta de alimento.

"La castigaba porque al parecer se había escapado, y con mis gritos la perrita salió corriendo y el señor detrás de mí, estuvo a punto de pegarme también".

Al principio, cuando encontraba un perro lastimado en la calle, lo llevaba a su casa o con algún veterinario. Su padre, al ver su interés por los animales, le regaló un terreno en Gómez Palacio para la construcción de un albergue para canes.

"Al principio la asociación rentaba un local, pero nos cobraban seis mil pesos mensuales y fue cuando mi papá me ayudó. Mi mamá también ha sido un gran apoyo para mí".

En Huellitas de Amor trabajan varias personas que apoyan a Anet en la difusión de eventos para la recaudación de fondos con el objetivo de atender a más animales y también para la construcción del albergue.

La construcción del albergue va lenta por la falta de recursos económicos, pero la ubicación es ideal porque está en una comunidad rural de Gómez Palacio, y ningún vecino resulta afectado.

"Por fortuna tengo amigos veterinarios que me ayudan a darle atención médica gratuita a los perros. Ahorita tengo siete en mi casa, pero a veces hay hasta 15 mientras se rehabilitan o recuperan".

La mayoría de los recursos para atender a los perros procede de la bolsa de los integrantes de Huellitas de Amor, y también de los eventos como boteos, colectas, o hamburguesadas.

"Hay gente que nos critica porque ayudamos a los perros en lugar de niños con necesidades, pero hay muchas asociaciones que se dedican a darles protección y eso no sucede con los animales".

Mientras concluye la construcción del albergue, Anet se da a la tarea de buscar hogares temporales para los perros. A las familias se les entregan con sus vacunas y con su alimento, algunas se comprometen a cuidarlos dos semanas y otras hasta tres o cuatro meses, y después debe buscarles un nuevo lugar para vivir.

Un consejo de Anet para los padres de familia es que no les regalen perros a sus hijos si no están listos para hacerse responsables de su cuidado.

"Eso pasa mucho con la raza labrador porque los ven en la televisión anunciando papel y les gustan mucho, pero cuando comienzan a crecer los abandonan".

Es necesario tomar en cuenta el tamaño de la casa y la disposición y recursos de la familia para el cuidado de los animales, "no es justo que se convierta al perro en el juguete de los niños y cuando comienzan a dar problemas porque escarbaron en el jardín o rompió cosas, lo primero que hacen es abandonarlos".

Por fortuna cada vez es mayor el número de personas que se interesa en el cuidado y el respeto a los animales.

"Ellos también se enojan, se ponen tristes y contentos, y aunque nosotros lleguemos de genio siempre nos van a mover la cola y nos van a recibir contentos, y hay que aprender de ellos".

De las autoridades municipales las asociaciones para el cuidado de los animales no han obtenido ninguna respuesta. Por ejemplo: se estima que en Torreón hay más de cien mil perros callejeros y el Ayuntamiento se había comprometido a realizar una campaña para la esterilización de siete mil canes, pero no cumplió con su palabra.

"Nadie sabe qué pasó con el proyecto ni con los recursos, y es muy lamentable esta situación, por eso las asociaciones y las veterinarias comenzaron a trabajar por su cuenta esterilizando a bajo costo".

Las personas que deseen ayudar a Huellitas de Amor en el cuidado de los animales puede comunicarse al número celular 87-17-84-44-66, o escribir al correo electrónico huellitasdeamor@live.com.mx o en la página en Facebook Huellitas de Amor.

"Ahora tengo a 47 perritos en hogares temporales. A veces la gente piensa que nos ayuda mucho porque nos regalan un bulto de croquetas pero sólo nos dura una semana, por eso es importante terminar de construir cuanto antes el albergue".

Por ahora, Anet también trabaja en una campaña de respeto a los burros y caballos que usan los carromateros para trabajar.

"A veces la gente los critica mucho, pero no se dan cuenta que los señores ganan muy poco y el dinero no les alcanza para alimentarlos bien".

Por eso Anet se reúne con los carromateros una vez al mes para darles pláticas de cómo cuidar a los burros y caballos.

Con el apoyo de varios amigos veterinarios iniciará una campaña de limpieza dental y desparasitación de los caballos, sin embargo, no han encontrado un lugar adecuado para realizarla.

"Cada limpieza dental cuesta más de mil pesos y esto va a cuenta de Huellitas de Amor, pero necesitamos un lugar con ciertas características porque es necesario que cuente con electricidad y una especie de tubo para poder pasar un lazo y sostener la cabeza de los caballos para la limpieza dental, y ojalá alguien nos pueda ayudar para concretar la campaña".