Acta tuvo marca de 214-266.
Alguien tenía que cargar con la culpa por el derrumbe de los Indios. Como suele ocurrir, fue el manager, en esta ocasión Manny Acta.
El dominicano, contratado por Cleveland en 2009, luego de dos campañas con más derrotas que victorias al frente de Washington, fue despedido ayer por los Indios, que en julio tenían aspiraciones de meterse a la postemporada pero terminaron hundiéndose al sótano de la División Central de la Liga Americana.
Cleveland estaba a tres juegos del primer lugar el 21 de julio antes de perder 21 de 25 encuentros. En agosto, su foja fue de 5-24, y el equipo siguió en caída libre hasta el último lugar. Desde luego, no toda la culpa del mal desempeño es de Acta, pero hubo ocasiones en que los Indios parecieron jugar con desgano.