El juicio contra el sueco Peter Mangs, de 39 años y acusado de una oleada de crímenes en Malmö (Suecia), la mayoría contra inmigrantes, comenzó hoy en el tribunal de dicha ciudad del sur del país.
Mangs, conocido como "el francotirador de Malmö, está acusado de tres asesinatos, doce intentos de asesinato, incluido un tiroteo contra la mezquita de Malmö, y de planear un homicidio.
Además se le imputan cargos por agresión grave y por daños, delitos cometidos entre 2003 y 2011.
El acusado, que permanece en prisión preventiva desde su detención en noviembre de 2010, se declaró hoy inocente de todos los cargos salvo los dos de daños causados por disparos hechos con una pistola junto al estadio de fútbol y un edificio público.
Durante la presentación del caso, la fiscal, Solveig Wollestad, señaló que en el apartamento de Mangs se encontraron pelucas, armas, cartuchos y otros elementos que lo incriminan.
Entre 2009 y 2010 hubo varios tiroteos en Malmö, la tercera ciudad sueca, que tuvieron como objetivo principal a la numerosa población inmigrante de la localidad, que supone cerca de un tercio del total.
La investigación policial apunta a que hay otros motivos en los actos del acusado, aparte del componente xenófobo, como una actitud hostil hacia personas con pasado criminal.
Un examen preliminar ha revelado además que Mangs padece problemas psíquicos.
El juicio, que se desarrolla en medio de fuertes medidas de seguridad, se prevé que durará hasta mediados de julio.
El caso de Mangs ha vuelto a poner de actualidad el de John Ausonius, "el hombre láser", un francotirador que desató el pánico en la población inmigrante del área de Estocolmo a principios de la década de 1990 y que cumple cadena perpetua por un asesinato y nueve intentos de asesinato.
Ausonius recibió ese apodo por tener como arma preferida para sus crímenes un rifle con una mira láser.