Siete meses después de que el alcalde Eduardo Olmos declaró que no firmaría el convenio con el gobierno de Coahuila "Por una ciudad mejor", que implicaría trabajar en un esquema "de cooperación administrativa" en varios rubros, ahora el Estado lo envía al Municipio "por partes".
Ya se autorizó un convenio de Fomento Económico y se alista otro de Catastro e Información Territorial.
El pasado 30 de agosto, con el apoyo de los regidores del PRI, se autorizó el "Convenio de coordinación y cooperación mutua para la competitividad, planeación, vinculación, mejora regulatoria, otorgamiento de incentivos y estímulos para las empresas".
De acuerdo con las cláusulas de este convenio, el Gobierno estatal "podrá proponer modificaciones a las políticas en materia de promoción y fomento económico que realice el municipio".
Ayer en la reunión de la comisión de Hacienda se presentaría un convenio de colaboración administrativa entre el Municipio y el Estado, a través del Instituto Coahuilense de Catastro e Información Territorial.
La discusión sobre el tema, sin justificación, fue "saltada" del orden del día y pospuesta.
Al igual que el de Fomento Económico, la intención es para que el municipio "reciba apoyo y asesoría en materia catastral por parte del Gobierno estatal".
El Cabildo autorizó al alcalde Eduardo Olmos el pasado 30 de marzo de este año a firmar el Convenio por una ciudad mejor con el Estado, pero tras cuestionamientos por una posible violación a la autonomía municipal, Olmos no lo hizo.
Aclaró entonces que al decidir no firmar el convenio no implicaba un rechazo pues consideró que "no debe haber temor de una vulneración a la autonomía municipal, tampoco de una sumisión a las decisiones del Estado".
