Los aparatos de inteligencia financiera identificaron que parte de los 4 mil 300 millones de pesos obtenidos a través de préstamos bancarios por Javier Villarreal, exsecretario del Servicio de Administración Tributaria de Coahuila (Satec), prófugo de la justicia, fueron sacados del país.
En un principio los recursos fueron ingresados a las cuentas del Satec para los programas públicos que habían sido solicitados, pero por medio de operaciones bancarias fueron colocados en cuentas de Estados Unidos y Europa a través de una sociedad de inversión. Esto le permitió a Villarreal obtener ganancias -producto de los intereses generados- de hasta 20 millones de pesos mensuales aproximadamente. Esa es una de las principales líneas de investigación de la Procuraduría General de la República (PGR), toda vez que se tiene conocimiento que los recursos eran depositados en cuentas a nombre de Villarreal, sus familiares e incluso otros de sus cómplices.
Con documentos falsos tramitó préstamos por más de 4 mil 300 millones de pesos con tres bancos mexicanos para el estado de Coahuila. Otra de las líneas que indagan es que el dinero se quedó en EU.
La PGR solicitó a autoridades de EU los movimientos financieros del exfuncionario y sus cómplices para determinar la red de vínculos donde podrían estar involucrados más funcionarios.
Villarreal y cuatro funcionarios del Satec, de la Tesorería Estatal y del Fondo de Garantías para el Impulso a la Micro Empresa -prófugos de la justicia- obtuvieron del Banco del Bajío un crédito por mil millones de pesos, los cuales fueron devueltos, luego que funcionarios del banco descubrieron que el crédito fue solicitado con documentos falsos.