Sin duda alguna, el deporte torreonense vive uno de sus capítulos más tristes de la historia y ello es debido a la inconsciencia y total desinterés de las autoridades municipales, que prácticamente se han desentendido de inyectarle trabajo, recursos y principalmente cariño.
Fue triste visitar ayer las oficinas de la Comisión del Deporte, donde la ausencia de los empleados del lugar fue prácticamente total, algo que también es algo casi normal, ya que finalmente se trata de elementos que sólo cobran y en muy escasas ocasiones se les ve hacer acto de presencia y aún menos realizar alguna labor a favor del deporte local.
Aunque se sabe que en las últimas semanas han trabajado mucho, pero sólo en las acciones de campaña a favor del 'tricolor', las cuales se desarrollan en las colonias populares de Torreón, ahora se notó su ausencia al encontrarse las oficinas prácticamente a oscuras, apenas con dos empleados ahí para hacer guardia.
Lo mismo ocurrió en el Auditorio Municipal, donde prácticamente todos los empleados también brillaron por su ausencia, y de acuerdo a los enterados, se supo que los empleados asignados al área deportiva recibieron la mañana libre, con la condición de presentarse en punto de las 15:00 horas en el Coliseo Centenario de Torreón, donde deberían de ayudar en la logística del mitin encabezado por el presidenciable del 'tricolor'.
Lastimosamente, la titular de dicho departamento tampoco fue encontrada, como ha ocurrido desde hace semanas, ya que, se sabe, también anda en plena campaña, sin importar que se trata de horario de trabajo por el cual cobra puntualmente unos nada despreciables miles de pesos, al igual que varios de sus colaboradores.
Resulta penoso que el recurso público, ya de por sí escaso, siga destinándose al pago de elementos que lejos de cumplir con un compromiso ante la sociedad, se dedican a vigilar y defender intereses de grupos políticos, donde el deporte es lo menos importante y sólo es utilizado para el ascenso de politiquillos sin escrúpulos.
La comunidad deportiva de Torreón sigue a la espera de respuestas a sus múltiples necesidades y es casi seguro que seguirá en la misma tónica por lo que resta de la presente administración, la cual parece eternizarse, al menos para quienes es verdaderamente urgente el apoyo y el trabajo.
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