Todas las pistas parecen indicar que el camino hacia la cuarta estrella y por fin asistir al Mundial de Clubes se torna cada vez más transitable. No hay misterio, la historia de Santos Laguna nos ha mostrado una y otra vez que las posibilidades de levantar un trofeo no sólo se acrecientan sino que prácticamente no hay otra vía que hacerlo en casa. En cuanto a la Concacaf, Liga de Campeones, la semifinal contra los Cohetes Rojos de Toronto cerrará en el TSM y de llegar a la final contra Monterrey o Pumas, el juego de vuelta, es decir, la finalísima también sería en el Corona.
Por supuesto que ese tipo de estadística ayuda, pero sin un equipo, no sólo competitivo sino incluso poderoso, de poca ayuda serían los números. Santos cuenta con un plantel fuerte, me atrevo a decir que mejor del que ha llegado a tres finales en cuatro torneos. Las contrataciones de Marc Crosas y Hérculez Gómez han sido brillantes y oportunas, reforzando la línea media y, por fin, dotando a Oribe de su pareja ideal. Existe banca, por lo tanto las posibilidades de éxito total en ambos torneos es factible.
En la Liga, obvio, mantenerse en los cuatro primeros es fundamental, para asegurar (con la maldición del número uno) cerrar en el confort del hogar. Con Santos la casa manda, lo más cerca que se ha estado de dar la vuelta olímpica fuera de esta terregosa Comarca fue en Toluca, pero el karma de Rubén Omar mostró todo su poder, aplastando el pobre espíritu de Morales, Vuoso y Arce, los que fuimos testigos de la hecatombe, sabíamos que otra oportunidad así de apetitosa de coronarse fuera de casa quizás tendría que esperar un siglo completo.
En Monterrey ya se relamen los bigotes con lo que ellos llaman el doble bicampeonato, Tigres gana nuevamente la Liga y Rayados repite como monarca de la Concacaf, sólo imagínense que un solo equipo eche por tierra sus sueños, que para ellos son casi certezas. Sí, los Guerreros son la amenaza más grande para las esperanzas regias, tanto en un torneo como en el otro, Monterrey sabe que de eliminar a los Pumas y enfrenta al Santos (que deberá eliminar a Toronto) el juego de vuelta en la Comarca los pone a temblar, sólo basta un ejemplo, en la final que le ganó Rayados a los laguneros, el de ida en el Corona fue ganado por los de verde y blanco.
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