La gente de mi edad (cincuentones) y obviamente mayores, recordamos los tiempos de los Diablos Blancos del Torreón y la Ola Verde del Laguna, los ahora añorados años sesenta y setenta. ¡Venía el América compadre! Las directivas de ambos equipos al grito de: "¡se impone el día del club!", le subían despiadadamente al precio de los boletos, pero eso sí, nos recompensaban con "El día del aficionado" cada vez que venía el méndigo Irapuato o el Ciudad Madero colocando las entradas al dos por uno. Pero era el acontecimiento anual, los orgullosos millonarios del América con Borja, Reynoso, 'Monito' Rodríguez, 'Pajarito' Cortés, Borbolla, Pata Bendita, etcétera, cracks por todos lados, el prepotente y soberbio equipo capitalino siempre peleando por el campeonato.
El Torreón y el Laguna aspiraban siempre a no perder contra esta constelación y siempre, sucediera o no, se reclamaban los malos arbitrajes sí o sí. Uno de los más conocidos silbantes de aquellas épocas era Domingo de la Mora y cada vez que pitaba un juego entre laguneros y los cremas se le rebautizaba como Domingo del América.
Cuando Diablos y la Ola Verde visitaban el atemorizante Azteca las derrotas menudeaban y cuando se conseguía arrancar un punto en México adelantábamos la Feria de la Uva y el Algodón, en aquellos tiempos efectivamente existían uvas y algodón en estas áridas tierras. Los partidos en la capirucha los seguíamos en nuestras teles en blanco y negro, de esas de torreta que pesaban igual que un refrigerador, me atrevo a pensar que en los sesenta y setenta todavía estábamos lejos del liderato de obesidad en el mundo debido a que nos teníamos que parar a cada rato a cambiarle de canal no importa que sólo hubiera dos o tres opciones.
Domingos al mediodía en vivo y en directo, y para los de feria a todo color, América-Torreón o América-Laguna, ¡un acontecimiento! … Con el tiempo, la grandeza de los de Coapa se ha venido deteriorando y con la llegada de los torneos cortos de plano se ha convertido, si no en un equipo del montón, sí en uno más de la clase "B", de esos equipos atrás de los dominadores en estos torneos que se juegan a partir del segundo semestre de 1996.
A tal grado ha llegado el desprestigio de las ahora Águilas, que Santos Laguna manda al legendario Coloso un equipo entre "b" y "c", mandando un claro mensaje, jugar contra el América pasa a un segundo o tercer plano, el partido que realmente interesa es el del miércoles en el Tecnológico de Monterrey contra los ahora más odiados rivales, el Monterrey, sí, ahora son los Rayados los presuntuosos y agrandados , contra ellos hay que salir con todo, contra los alados a cumplir burocráticamente con el compromiso. Cómo cambian los tiempos, pero mientras los grandes de apodo o de alias sigan dando tumbos, los equipos clase "A" como Santos, Monterrey, Tigres y Pachuca deberán de buscar rivales de mayor competencia y no de ese rancio abolengo venido a menos.
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