La columna del perro
¿ERES BUEN VECINO?
Siempre ha existido gente cruel con los animales y para con las personas, en la actualidad es igual, aunque una cosa es muy cierta y es que por fortuna los buenos son más.
Hace aproximadamente 6 años por el rumbo de Galerías tenían en una construcción amarrado a un perro con un alambre, y a decir del velador que era quien lo "cuidaba", aunque creo más bien que el perro cuidaba al velador. Este perro les sirvió de cuidador mientras la obra estuvo en construcción, y luego cuando ésta terminó, como suele suceder muy a menudo el perro "estorbó", y la orden del encargado de la obra, hacia el velador fue "deshazte del perro", aviéntalo al canal para que se ahogue.
Pero como en todo obra DIOS, Leticia una señora de buen corazón ya le había echado el ojo a ese tan descuidado perro, y al enterarse fortuitamente de la consigna de ejecución al estilo nazi, lo rescató y se lo llevó a su casa.
Ya en su hogar Leticia le dio de comer, lo aseó y lo enseñó a confiar, pues era muy temeroso, y como muestra de su amor hacia su rescatado le cantaba seguido, esta estrofa de una canción que dice: Le fui poniendo un poquito de amor, lo fui abrigando en mi alma, para que nadie le robe el calor, para que nunca se vaya.
Hoy este perro a quien pusieron por nombre Torombolo y que por seña particular le falta un trozo de oreja, cicatriz que le dejó una pelea desigual, pues ahora este ejemplar de color café y de ojos sumamente expresivos, se ha convertido en un agradecido y celoso guardián de la casa de Leticia quien vive con su hija una brillante estudiante de medicina y por quienes Torombolo sería capaz de dar la vida en caso de ser necesario.
Pero por desgracia los problemas no acaban ahí, ni para Leticia ni para Torombolo pues su vecina de la casa inmediata se quejo de que Torombolo, la molesta con sus ladridos cuando les ladra a los extraños, diciéndole en una ocasión "oye cuántos años va a vivir tu perro", y en otra ocasión le dijo, "oye y por qué no se muere tu perro", y el colmo la ultima vez le dijo "oye no piensas irte pronto de aquí".
Con el llanto contenido, Leticia le respondió a su vecina, a quien aun a pesar de todo aprecia, le dijo "mire, ahorita estoy pasando por un momento muy triste y muy fuerte, pues mi esposo el compañero de mi vida acaba de morir, todavía no me repongo y no tengo cabeza, ni dinero, ni intención de cambiarme".
Cuando supe de este "caso de la vida real" pensé, todos como vecinos causamos algún tipo de incomodidad, a las personas de al lado, y sólo pensamos equivocadamente que nosotros somos los vecinos perfectos que no molestamos a nadie.
Vivimos en una sociedad que por desgracia es tolerante y cobarde para los agravios mayores, pero nos defendemos y quejamos con lujo de detalle de las cosas triviales de la vida como si nosotros no molestáramos.
Y ahora para terminar una gota de filosofía:
Sólo bastó una cosa para que los malos triunfen y es que los buenos no hagan nada.
Miguel_daviladavila@hotmail.com
ADÓPTANOS
"Niño & Deisy"
Niño: (izquierda), macho, 6 meses, esterilizado, simpático, juguetón, excelente compañero, ando en busca de un hogar donde quieran mi compañía.
Deisy: (derecha), hembra, 1 año, esterilizada, simpática, juguetona, excelente compañera. Adóptanos!!!
Anímate no lo pienses más, adopta un amigo leal e incondicional sin costo alguno, sólo envíanos un correo a: miguel_daviladavila@hotmail.com, o comunícate al 871-1201787. El correo y teléfono anterior es para personas interesadas en adoptar una mascota, no contamos con instalaciones físicas para dar albergue a animalitos (no hay refugio). Esteriliza a tu mascota, no olvides llevar al día el esquema de vacunación de tu mascota. Identifícala con una placa que contenga información básica en caso de extravío, no permitas que se convierta en una estadística más de muerte en la calle. Si por alguna razón tienes una mascota no deseada no la abandones en la calle, no la condenes a muerte si ésta no logra encontrar un lugar seguro donde no la agredan, donde pueda protegerse del clima, y donde pueda encontrar agua y alimento. Demos el ejemplo a nuestros hijos, tomemos decisiones responsables.